Tegucigalpa – El Congreso Nacional, entregó este lunes, la condecoración Gran Cruz con Placa de Oro, a la fundadora de las Aldeas SOS, Sor María Rosa Leggol, por su invaluable labor social en favor de los niños de Honduras.
– “Niños, no se queden en la calle, vengan, yo los cuido”, dijo la religiosa.
Después de una solemne misa de acción de gracias oficiada por el párroco Carlo Magno Núñez, una comisión de diputados del Poder Legislativo, entregó el reconocimiento a Sor María Rosa, quien agradeció por el galardón, al tiempo que motivó a todos los diputados a apoyar las causas sociales y que revisen las leyes en beneficio de los niños más pobres del país.
La “Madre”, pidió al Poder Legislativo que “por favor piensen cuando hagan leyes, no hacerlo sin antes pedir al Espíritu Santo la gracia de sabiduría para saber cómo hacer bien las cosas con la dirección de Dios”, a la vez, recordó que Dios creó los 10 mandamientos que están “escritos en piedra y nadie los podrá borrar”.
Asimismo, recomendó a los parlamentarios que den una “miradita” a los mandamientos para que Dios les ilumine en sus actuaciones en beneficio de todos los hondureños.
La diputada proyectista del decreto de condecoración, parlamentaria de Vamos por Atlántida, Audelia Rodríguez, reveló que ella es una de las muchas niñas que crecieron bajo la responsabilidad de Sor María Rosa, y agradeció a la Sociedad Amigo de los Niños por el acompañamiento en la formación de 87 mil niños.
Al evento también asistieron las diputadas Waldina Paz, Ana Joselina Fortín y la vicepresidenta Gladys Aurora López.
