Tegucigalpa – “Conmigo no va la inmoralidad, los negocios chuecos, ni el enriquecimiento personal”, expresó durante su discurso de toma de posesión en enero de 2014, el alcalde de Talanga, Jorge Neftaly Romero Mejía (40), quien fue capturado la mañana de este martes en el marco de la operación “Avalancha”, acusado de lavado de activos y narcotráfico.
Romero, conocido por la población de Talanga como “Nepta”, ha sido uno de los alcaldes más activos y más disciplinados del país, según aseveró el propio presidente de la Asociación de Municipios de Honduras (Amhon), Nery Cerrato.
Tras ocho años del gobierno nacionalista del exalcalde Roosevelt Eduardo Avilés, en la ciudad de Talanga, el liberal Jorge Neftaly Romero, tomó posesión de su cargo como nuevo edil de los talangueños prometiendo transparencia y rendición de cuentas y hoy, dos años después enfrenta la justicia, al igual que otros jefes edilicios que guardan prisión acusados de narcotráfico y lavado de activos.
En su toma de posesión, Romero recordó que no fue fácil, pero que gracias a la ayuda de Dios y al respaldo de los talangueños, logró convertir un sueño en realidad.
«Juntos vencimos las campañas de represión y de desprestigio montadas en mi contra, los que siempre nos hicieron sufrir, esos que siempre se han aprovechados del pueblo, aplicando políticas que sirvieron para beneficios personales y no de la comunidad», expresó Romero en esa ocasión.
Lamentó que «ellos han progresado, mientras las grandes mayorías se hunden en el atraso, en la miseria y en analfabetismo, por la falta de fuentes de empleos dignos, y eso impidió mejorar la calidad de vida de los talangueños».
Romero aseguró que trabajaría con transparencia, en cuanto al manejo de los impuestos, los que se reinvertirían en obras de importancia para generar progreso, en el casco urbano, como también en zonas rurales de la comunidad.
«Conmigo no va la inmoralidad, los negocios chuecos, ni el enriquecimiento personal, porque los impuestos son del pueblo y esos dineros son sagrados para mí, considero que ese dinero debe ser invertido en obras que beneficien al pueblo», prometió Romero al momento de tomar el bastón de mando.
