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“Zelayistas” sabotean propaganda presidencial y dicen que seguirán acciones para descalabrar las elecciones

Tegucigalpa – Seguidores del depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, sabotearon hoy propaganda de los candidatos presidenciales Elvin Santos, del gobernante Partido Liberal, y Porfirio Lobo, del opositor Partido Nacional, a quienes califican de «golpistas».
 

Los líderes de la resistencia siguen la línea del depuesto Presidente quien hoy declaró a una emisora local que las elecciones generales son un proceso que no tiene credibilidad ni aceptación y que su realización no deberá permitirse.

En su protesta de hoy en Tegucigalpa para exigir la restitución de Zelaya, un grupo de seguidores del depuesto mandatario pintó consignas como «Urge Mel Viva» sobre las banderas en rojo y blanco de la propaganda electoral de Santos.

Una parte de la propaganda de Santos amaneció hoy colgada en postes del tendido eléctrico en varias calles y bulevares de Tegucigalpa, como parte de la campaña para las elecciones generales del 29 de noviembre próximo.

La campaña electoral se inició hoy, en cumplimiento de la ordenanza del Tribunal Supremo Electoral.

Santos, quien era vicepresidente de Honduras durante la administración de Zelaya, ambos del Partido Liberal, renunció a ese cargo de elección popular el año pasado, para buscar la Presidencia del país.

Los manifestantes que apoyan a Zelaya, aglutinados en un movimiento de resistencia, marcharon hoy por la región oriental de la capital.

A lo largo de un bulevar aprovecharon la propaganda de Santos para revertirla a favor de Zelaya.

Además, los seguidores de Zelaya destruyeron hoy una enorme valla con la imagen de Lobo y su lema «Cambio ya», de su campaña para los comicios internos del Partido Nacional celebrados el año pasado.

Elvin Santos y Porfirio Lobo son señalados como «golpistas» por los seguidores de Zelaya, que desde la semana pasada comenzaron a pedirles a los hondureños que no apoyen el proceso electoral.

En la campaña electoral también participan los minoritarios partidos Democracia Cristiana, Innovación y Unidad-Social Demócrata y Unificación Democrática, de izquierda.

Se suma a estos la candidatura presidencial independiente del dirigente popular, Carlos Reyes, quien exige la restitución de Zelaya en el poder.

Zelaya fue expulsado del país y posteriormente destituido por el Parlamento, que nombró como presidente a Roberto Micheletti, también miembro del Partido Liberal de Honduras.

El propio Manuel Zelaya, quien desde su exilio, se comunica permanentemente como medios locales que apoyan su proyecto político en Tegucigalpa para animar a la resistencia a sabotear las elecciones.

Zelaya, tilda el proceso electoral de “fraudulento” y dice que no aceptará sus resultados.

La resistencia animada por la ex primera dama Xiomara Castro, afirma que Zelaya deberá regresar a Honduras y el tiempo que ha permanecido fuera del poder deberá ser repuesto.

El proyecto significa que sí el retorno de Manuel Zelaya llegara a materializarse, éste no entregaría el mando de la nación el 27 de enero de 2010 como manda la Constitución Política hondureña, lo que daría vida al proyecto continuista que le sacó de la presidencia el 28 de junio anterior.

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