Tegucigalpa – Un hecho propio de las recordadas escenas del oeste salvaje estadounidense se vivió en Catacamas, cuando un grupo de personas armados enfrentó a policías desplazados a una iglesia, lo que provocó un enfrentamiento verbal que casi termina en tragedia.
El hecho ocurrió el jueves en Catacamas, la segunda ciudad del departamento de Olancho, cuando se realizaba una misa de dos personas que habían sido asesinadas el pasado martes en la aldea Las Mesitas de la misma ciudad.
Durante el oficio religioso se presentaron una decena de personas con armas visibles, lo que provocó el miedo de los vecinos que temían un enfrentamiento con otro grupo de hombres armados.
Ante dicha situación, la Policía Nacional desplazó una patrulla de efectivos al mando del comisario Cristian Nolasco que ordenó a las personas que permitieran ser requisadas.
La oposición de los hombres provocó un enfrentamiento verbal y que los policías levantaron sus armas y las colocaran en disponibilidad de disparo, mientras los civiles armados gritaban y señalaban su oposición a ser requeridos.
Todo ello quedó registrado en un video,donde el comisario Nolasco pidió a las personas que se dejaran inspeccionar y que no mostraran, ni tocaras las armas, ya que ello los habilitaba a disparar.
El jefe policial pidió a sus compañeros, muchos con sus armas también en disposición de disparar, que bloquearan con sus vehículos la salida de los autos de los civiles armados, luego que la discusión acalorada concluyera.
Incluso se puso una patrulla policial que impidiera el paso de una camioneta blanca, donde se transportaba Ana Amador, que de acuerdo a las autoridades goza de medidas de protección.
Las personas armadas fueron detenidas y llevadas a la comisaría policial donde se les decomisaron sus armas y serán procesados por cargos contra agentes policiales. (PD).