San Pedro Sula – El estado de salud de las siamesas es estable, pero necesitan con urgencia ser separadas porque el riesgo que no puedan sobrevivir se incrementa a medida que pasan las horas, dijo este domingo el neonatólogo, Samuel Santos.
El galeno, quien asistió el parto de las bebés, dijo que es difícil determinar cuánto tiempo podrán vivir las menores sino se separan.
“Las niñas amanecieron bien, y están luchando por su vida, pero no podemos calcular un porcentaje de probabilidad de vida, eso depende de lo que aguante el único corazón que las mantiene con vida, este es un caso muy complejo”, manifestó el doctor a la radio capitalina HRN.
Agregó que “la malformación es bastante rara y no hay otro caso con cual poder compararlo, lo que sí es seguro es que sólo una de las niñas tiene probabilidades de vivir si se logran separar, pero el riesgo es bastante alto”.
Santos dijo que hay que presentar el caso a especialistas en el extranjero para que vean los estudios y digan qué se puede hacer.
“No es fácil, se necesita una operación urgente porque cada día que pasa disminuyen las probabilidades de vida de la niña que puede ser salvada”, argumentó.
Las siamesas sólo tienen un corazón y comparten el hígado, una de las bebés se mantiene viva porque tiene un vaso sanguíneo del corazón de su hermana, relató.
El viernes a eso de las 9:15 de la mañana nacieron las siamesas en el hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula, norte de Honduras, los padres de la menor piden apoyo para salvar la vida de al menos una de sus hijas.
