El portavoz del Ministerio Público en la región norte, Elvis Guzmán, informó que la madera era tipo granadillo la cual es prohibido su corte y que el cargamento iba rumbo a Japón.
La Policía de Fronteras vio sospechoso el cargamento y procedieron a inspeccionarlo, detalló el funcionario.
Según Guzmán, la carga decomisada asciende a unos 40 mil pies de madera.
Asimismo, dijo que la Fiscalía investiga un crimen ecológico en una zona protegida en el sector de Omoa, donde se han deforestado unas mil 600 hectáreas.
La Unión Europea (UE) anunció hace unos días que contribuirá con 47 millones de euros a un proyecto para proteger los bosques en Honduras, una iniciativa que velará además por la agricultura local.