Tegucigalpa – Con la participación de autoridades y personal de diversas instituciones que conforman el Gabinete de los Cuidados, así como de cooperantes internacionales y organizaciones de la sociedad civil que integran la Mesa Técnica de los Cuidados (MeCuida), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) presentó los resultados del primer piloto de implementación de la “Herramienta de Georreferenciación de Cuidados” en dos municipios de Honduras: el Distrito Central y Sensenti, en el departamento de Ocotepeque.
El objetivo fue dar a conocer un primer análisis sobre la oferta, demanda y accesibilidad a los servicios de cuidado en el país, las brechas existentes, avances que se requieren, así como fortalecer el conocimiento promoviendo el desarrollo de capacidades.
Los datos generados en este primer pilotaje ya están disponibles, bajo la administración de la SEDESOL, y permiten al gobierno poder iniciar acciones para abordar la problemática. Para los próximos meses, se prevé el escalamiento de dicha herramienta junto a un proceso de transferencia tecnológica y de conocimiento al Observatorio de Desarrollo Social (ODS) quien asumirá la gestión y administración de los datos por SEDESOL.
Este será un instrumento para informar las políticas públicas alrededor de estos temas y mejorar la planificación, monitoreo y desarrollo de los servicios de cuidado, desde un enfoque de protección social, derechos e igualdad de oportunidades para las mujeres.
“Este sistema de georreferenciación que viene a ser la primera en el país y sobre todo dentro de SEDESOL, en el tema del sistema nacional de los cuidados, es una herramienta que nos brindará la oferta y demanda de estos servicios y, sobre todo, a que poblaciones tenemos que llegar”, expresó Mirtha Gutiérrez, viceministra de SEDESOL.
Esta es una herramienta digital creada por el PNUD y que la SEDESOL implementara a través del Observatorio de Desarrollo Social (ODS), con mapas interactivos que muestran dónde están los servicios de cuidado en el país y cual en su demanda actual y/o potencial, y su nivel de acceso para la población. En una siguiente etapa, se prevé además mapear la calidad de los servicios y ampliar el mapeo a nivel comunitario.
Los resultados del primer mapeo identificaron que, en Distrito Central operan alrededor de 1,366 guarderías o centros de atención de primera infancia (edades de 0 a 5 años), 99 centros para personas adultas mayores, y, 118 lugares que ofrecen cuidados para personas con discapacidad.
Los resultados de este primer pilotaje indican que, en promedio, en el Distrito Central (DC), la población que cuenta con mayor cobertura son los menores en primera infancia; mientras que, aproximadamente una de cada tres personas adultas mayores y personas con discapacidad no tienen disponibilidad de estos servicios.
Por otro lado, en términos de acceso, los datos preliminares estiman que, en DC alrededor de 3 mil 800 niños y niñas en la primera infancia no tienen un centro de cuidados accesible o el más cercano está a más de 20 minutos caminando; sin embargo, la mayor brecha de acceso a los servicios de cuidado está en las personas adultas mayores y personas con discapacidad; para el primer grupo, alrededor del 36.5 % (más de 29 mil personas) y en el caso del segundo, alrededor del 33 % (más de 8 mil personas) no tienen un centro de cuidados accesible o es inexistente.
En el área rural la situación se acentúa, Sensenti, Ocotepeque refleja una brecha del 17 % para personas adultas mayores, que se agrava para población con discapacidad con un 92 %, evidenciando una importante brecha de atención y acceso que requiere ser atendida por el Estado, tanto a nivel rural como urbano.
“En este contexto es importante subrayar esta herramienta como un recurso estratégicoparaidentificación precisa de necesidades, focalización de políticas públicas, promoción de la igualdad de género, la toma de decisiones basadas en evidencia y el fortalecimiento de la gobernanza del cuidado”, dijo Ivan Zverzhanovski, representante residente adjunto del PNUD.
El cuidado de la familia
Históricamente, en América Latina y el Caribe, la organización social del cuidado ha recaído de manera desproporcionada en las familias, con un rol central de las mujeres. Honduras no es la excepción a esta tendencia, las mujeres dedican un 15.5 % de proporción de tiempo a quehaceres domésticos y cuidados no remunerados, en comparación con el tres por ciento (3 %) de los hombres según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en el 2023.
Es decir, las mujeres hondureñas dedican más de cinco veces el tiempo que dedican los hombres a las labores del hogar y los cuidados, lo que limita su participación en el mercado laboral y en otras esferas de desarrollo personal y profesional.
En este contexto, la georreferenciación de cuidados se convierte en una herramienta clave para identificar territorios con poca oferta de servicios de cuidados o limitado acceso y disponibilidad. Gracias a esta herramienta, es posible fortalecer la planificación de políticas públicas y acciones concretas que garanticen una mayor disponibilidad y accesibilidad a estos servicios, lo que contribuye a liberar el tiempo que las mujeres dedican exclusivamente a las labores de cuidados creándose así condiciones más favorables para su inserción y permanencia en el mercado laboral y en otros ámbitos de su desarrollo.
Para avanzar hacia un Sistema Integral de Cuidados en Honduras, es fundamental contar con fuentes de datos apropiados y actualizados, haciendo uso de herramientas que permitan una planificación eficiente y equitativa de los cuidados.
Daniela de los Santos, analista de género del PNUD Latinoamérica recalcó: “El desarrollo de la Herramienta de Georreferenciación de Cuidados en Honduras marca un avance fundamental hacia una política de cuidados basada en evidencia. Sus próximos pasos —incluyendo la institucionalización de la herramienta en la SEDESOL, su escalamiento nacional, el levantamiento de datos en campo y la incorporación de indicadores de calidad— permitirán fortalecer la planificación, focalizar inversiones y reducir brechas territoriales en el acceso a servicios de cuidado. Esta herramienta contribuye a fortalecer políticas para visibilizar, valorar y redistribuir el trabajo de cuidado, reducir su carga desproporcionada sobre las mujeres, dignificar el trabajo remunerado en el sector y promover la participación de quienes cuidan y requieren cuidados’’.
Innovación al servicio de la población
La “Herramienta de Georreferenciación de Cuidados” se compone de tres etapas clave, como son: 1) Mapeo de la oferta de cuidados, mediante la identificación de los actores y servicios disponibles en el territorio; 2) Mapeo de la demanda de cuidados, a partir de censos, proyecciones poblacionales y otras fuentes de información que permitan proyectar la necesidad de este servicio y; 3) Estimaciones de accesibilidad, con modelos que analizan el desfasaje espacial entre la oferta y la demanda de cuidados.
Su implementación permite identificar las zonas con mayores déficits de servicios de cuidado, así como una estimación de la población que necesita cuidados y la capacidad que esta tiene de acceder a la oferta disponible.
Pedro Ramón Salgado, funcionario de SEDESOL, destacó que “la herramienta es muy interesante en el mapeo para permitir el desarrollo de programas sociales enfocados en población como nosotros, con discapacidad; más allá de un bono temporal, se enfoquen en programas que sean dignificantes y sostenibles para apoyar mejor nuestro desarrollo”.
Este diagnóstico integral del territorio es clave para fortalecer la planificación de políticas públicas y acciones concretas que garanticen la disposición de estos servicios de acuerdo con las necesidades existentes, generar las condiciones de acceso que se requieran, así como avanzar en una siguiente etapa para garantizar la calidad de los servicios a través de la profesionalización de las personas cuidadoras, entre otros elementos, promoviendo un enfoque integral de acceso a servicios a la población desde la perspectiva de la protección social y la igualdad de género.
Además, la herramienta construye visualizaciones interactivas de estos datos en software de código abierto (sin costo), facilitando su sostenibilidad y la transformación digital de las instituciones públicas, promoviendo la escalabilidad de la herramienta.
“Para quienes tenemos una discapacidad como personas ciegas, los avances en la IA pueden ayudar en gran medida a través de opciones que permitan la descripción auditiva para poder navegar la herramienta y trabajar con la información de que dispone, esto sería muy útil que sea considerado en el desarrollo de la herramienta por SEDESOL”, resaltó William Antonio Álvarez, funcionario de la SEDESOL. JS