Tegucigalpa – A raíz de la actual situación de país un 40.2 por ciento de los hondureños piensa o desea emigrar de acuerdo al Sondeo de Opinión Pública presentado hoy por el Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación (ERIC) de la Orden Jesuita.
– El estudio se realizó entre el 1 y 12 de febrero de 2020 y cuenta con un 95 % de confianza.
Además, el estudio advierte que el porcentaje de los hondureños que desean emigrar se puede incrementar post-pandemia, es decir, a medida se supere la emergencia por coronavirus.
El sondeo que cuanta con error muestral de 2.5 % y un 95 % de confianza señala que el 59.7 % de los entrevistados no piensa en emigrar, contrario al 40.2% de los censados que piensa o dese emigrar, un 0.1% dijo no saber o no respondió.
“El 40 por ciento de la población que en algún momento ha pensado o deseado irse del país no es un porcentaje nada pequeño y deja establecido que la migración es una de las grandes opciones para la búsqueda de oportunidades de mejorar la calidad de vida”, concluye el estudio.
Asimismo establece que quizá a medida que avance el control de la COVID-19, estas manifestaciones de irse del país, potencialmente podrían incrementarse, dada las consecuencias de la pérdida de empleo y la agudización de la crisis económica.
Sobre las causas por la que los hondureños emigran, los resultados revelan que la situación económica, la falta de empleo y la falta de oportunidades con el fin de generar ingresos para el sustento de la familia acumulan el porcentaje mayoritario.
En ese sentido, un 57.2 % expresó que la causa por la que los hondureños emigran es por la falta de empleo y de generación de oportunidades para generar ingresos.
En este renglón un 21.9% de los entrevistados cree que los hondureños emigran por la situación económica, un 14.4 % cree que los empuja la violencia e inseguridad.
El resto de porcentaje se reparte entre los que emigran por reunificación familiar, razones de estudio y otras causas.
En la consulta anual se preguntó sobre la forma de emigrar de algún familiar, conocido o vecino en el último año; las respuestas mayoritarias se ubicaron en el uso de los “servicios” de un coyote para seguir la ruta migratoria, le siguen emigrar solo y en caravana.
Al respecto, la encuesta revela que algún familiar, conocido o vecino emigró con coyote (58.2%), solo (17.7%), caravana (15.0%), regularmente (7.3%) y otro (1.8%).
Al momento de preguntar sobre las razones que motivaron a quienes se fueron en caravanas, el 65.5 % dijo que lo hacían por la situación económica y la falta de empleo, ubicando en primer lugar un rasgo fundamentalmente económico para migrar de Honduras.
La violencia e inseguridad se ubica en segundo lugar con un 12.3 %, seguido de una razón práctica, “porque es más barato, no hay para pagar coyote” con un 5.0 % y “porque es empujada por otros” con el 5.3 %.
La extorsión, el miedo a los cuerpos armados y el no confiar en las promesas del gobierno son las otras razones manifestadas en esta pregunta.
