Los fiscales Elmer Santos y Sara Aguilar se unieron a la protesta que el lunes iniciaron sus compañeros Jari Dixon, Soraya Morales, Víctor Fernández y Luis Santos; y el jueves, arlon Dubón.
Aguilar denunció ser víctima de hostigamiento e intimidaciones por parte del coordinador regional de la fiscalía en San Pedro Sula, donde se desempeñaba, dijo, como fiscal de la Niñez, cargo del que fue trasladada a la fiscalía de Delitos Comunes, por represalia.
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Cuatro fiscales cumplen 5 días en huelga de hambre en protesta por corrupción
Tegucigalpa.- Cuatro fiscales hondureños cumplen hoy cinco días en huelga de hambre en protesta porque, según ellos, la corrupción sigue campeando en la Fiscalía General de Honduras.
El fiscal Jary Dixon indicó que empiezan «a sentir debilidad en el cuerpo», pero que «vamos a seguir hasta que haya un compromiso y voluntad de las autoridades del Ministerio Público para combatir la corrupción».
Agregó que ya están «cansados de estar denunciando que en el Ministerio Público de nada sirven las investigaciones sobre escándalos de corrupción, si no se concluye con la acción de remitir a los tribunales a los corruptos poderosos que hay en el país».
Dixon indicó que los fiscales en huelga de hambre también exigen «que haya una auditoria social en el Ministerio Público para que tenga credibilidad cualquier compromiso que hagan sus autoridades».
Los fiscales en huelga de hambre reciben visitas de familiares, amigos y de grupos representativos de la sociedad civil.
Participan en la protesta la ex fiscal de lucha contra la corrupción Soraya Morales, Luis Javier Santos, Jary Dixon, Víctor Fernández y Marlon Dubón, este último incorporado el jueves, procedente de San Pedro Sula, norte del país.
El fiscal general del Estado, Leonidas Rosa Bautista, dijo el lunes que los fiscales en huelga de hambre son los mismos que «desde hace cinco años vienen haciendo la misma denuncia, sobre las mismas personas y sobre los mismos hechos».
Rosa Bautista también expresó que él siempre ha estado dispuesto al diálogo con todos los fiscales, pero que lamentablemente no está en su poder imponerle patrones de conducta a profesionales que ha «querido hacer buenos fiscales, porque tienen materia y la madera para hacer buenas cosas».
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