Tegucigalpa – El subdirector del Instituto Nacional Penitenciario (INP), Germán McNeil, libró de culpas al actual director del penal de San Pedro Sula por el hallazgo de potentes armas, municiones, drogas y millones de lempiras en ese recinto carcelario.
– Sería mal intencionado culpar a las actuales autoridades por la situación de las cárceles.
– El Codeh también ha pedido enjuiciar al director del penal sampedrano por permitir lujos y todo tipo de beneplácitos a los reos.
“En ningún momento se está tratando de culpar al señor director del centro penitenciario de San Pedro Sula”, afirmó.
Actualmente el encargado del centro penal de San Pedro Sula es el coronel Geovany Iraheta, quien no suele ser tan mediático ni ofrece declaraciones a los medios de comunicación.
El subdirectir del INP justificó que el sistema penitenciario del país ha estado abandonado en las últimas décadas. “En la presente administración lo que se está haciendo es poniendo orden en el Instituto Nacional Penitenciario, en ese sentido podemos ver que es ahora que se están ejecutando este tipo de operaciones y prohibiendo el ingreso a artefactos prohibidos al interior de los centros penales”, remarcó.
Llamó a resaltar lo que han hecho las fuerzas del orden en las últimas semanas en el sentido de garantizar la estabilidad de las cárceles. “Estamos recuperando la gobernabilidad de los centros penales del país”.
McNeil se resistió a señalar culpables por la cantidad de armas, lujos y dinero en efectivo encontrado en el penal de San Pedro Sula. “Se deben realizar las investigaciones necesarias del caso, lo que sí tenemos que decir es que esto no ingresó de la noche a la mañana, no podemos satanizar la presente administración porque es ahora que se están realizando las acciones para recuperar el control de los recintos”, estimó.
Puntualizó que “no podemos decir que el actual director -cárcel de San Pedro Sula- sea el responsable. Repito, serán las investigaciones de las autoridades competentes las que arrojaran responsabilidades”.
Esta semana se dio cuenta del hallazgo de medio centenar de armas, municiones, granadas y más de 3.3 millones de lempiras tras un intenso operativo en la cárcel de San Pedro Sula, norte de Honduras.
Caritas lamenta que no se castigue a culpables
El representante de Caritas de Honduras, Carlos Patiño, señaló que la ingobernabilidad en los centros penales persistirá porque no existe castigo a sus directores y funcionarios que han estado a cargo de los mismos en los últimos años.
Indicó que las autoridades han perdido el control de las cárceles y han permitido todo tipo de ilícitos se puedan cometer sin ningún castigo.
“Esto tiene que ver con la precariedad del sistema penitenciario y con el control que están bajo la dirección de los centros penales, al final es una responsabilidad compartida entre el gobierno y los funcionarios que han estado a cargo en los últimos años de las cárceles”, arguyó.
El vetusto edificio, que alberga la cárcel norteña, fue construido a finales de la década de los 40 con el propósito de albergar a un máximo de 800 privados de libertad.
Sin embargo, debido a la falta de planificación y de una política penitenciaria efectiva, este centro penal alcanzó al 27 de febrero pasado una población de tres mil 227 reclusos, según datos del Instituto Nacional Penitenciario (INP). El traslado de 755 reos hacia El Pozo arroja la suma de alrededor de dos mil 400 internos que aún siguen en el penal sampedrano.