Tegucigalpa – La situación económica en 2021 para Honduras serpa muy compleja a causa de los efectos de la pandemia del COVID-19 y las tormentas tropicales, advirtió el expresidente del Banco Central de Honduras (BCH), y catedrático universitario, Hugo Noé Pino.
El economista señaló que 2021 se presenta como un año tan difícil como 2020 desde el punto de vista económico por varias razones, una de ellas es el hecho de que el golpe que ha sufrido la economía tanto por la pandemia, como por las dos tormentas tropicales es bastante fuerte, las proyecciones que se han hecho de caída de la producción este año es del 10 por ciento del Producto Interno Bruto, lo cual significa que los altos niveles de desempleo que ya existían en el país se han agudizado.
También muchas de las personas que estaban en condición de pobreza pasan a extrema pobreza y los de clase media de ingresos bajos pasan a pobreza, la posibilidad de recuperar la economía o la reactivación en el 2021 pasa por una serie de factores no todos de los cuales tienen perspectivas positivas, el primero de ellos hay que tomar en cuenta es que la inversión privada es muy importante para la recuperación, acotó.
Refirió que el 90 por ciento de la inversión total en el país proviene del sector privado, es cierto que habrá mayor inversión pública por la reconstrucción, pero obviamente, que el sector privado va a estar como pendiente a un poco de lo que marca el ritmo de la inversión pública.
Adicionalmente y como ha sido el ejemplo en períodos anteriores, la inversión tanto nacional y extranjera es muy cautelosa en un año electoral y las perspectivas en cuanto a conflictos electorales tan fuertes como las que manifestaron a finales del 2017 y en el 2018 están ahí, apuntó Noé Pino.
“Todavía a menos de 11 meses de tener elecciones generales no tenemos reformas de la Ley Electoral aprobadas, hay muchos elementos de incertidumbre; todo esto le agrega al 2021 elementos adicionales que impactan en la actividad económica, dentro de todo eso hay también luces, podríamos decir esperanzas que ojalá se concreticen, el hecho de que a nivel internacional se esté difundiendo una vacuna contra el COVID que permita volver a un determinado nivel de normalidad aún con las discusiones internas en cuanto a cuándo llegarán o si llegarán en las cantidades adecuadas, creo que es un elemento que nos da esperanza, pero en síntesis la situación del 2021 se presenta sumamente compleja para la mayoría de los hondureños”, recalcó.
Agregó que lo que se ha planteado en el Presupuesto General de la República para 2021 es un nivel de inversión que se había presentado en septiembre antes de las dos tormentas tropicales, ese nivel de inversión pública de 24 mil millones de lempiras lleva casi un 36 por ciento en programas sociales que son los programas asistencialistas que el presidente Juan Orlando Hernández, ha venido implementando en los últimos años, pero que no ayudan a resolver los problemas ni de la pobreza, ni del crecimiento económico.
“Esos programas en un año electoral y como lo estamos viendo ahora, se han convertido en una especie de maquinaria electorera, lo acabamos de ver con la entrega de casas que habían sido construidas en años anteriores, aunque la población que se alcanza es mínima de que se le va a dar dinero en efectivo a las familias, entonces hay toda una serie de distorsiones que no hacen que exista una voluntad colectiva y de todos los sectores hacia la recuperación económica, así que es un elemento adicional que no se mira con muy buena perspectiva”, consideró.
(om)
