Wilmer Zelaya, secretario del sindicato de la UNAH, manifestó que al terminar el periodo intensivo de clases, los organismos de dirección se reunirán para agudizar la “problemática”.
“Si no hay una respuesta satisfactoria a nuestro planteamiento, no descártanos que el tercer periodo se ponga en peligro”, expresó.
Zelaya reitero que en primer lugar exigen el reintegro de los empleados que fueron despedidos “de forma ilegal”.
Añadió que también piden el pago de “la deuda histórica al INPREUNAH”, la firma del decimo quinto contrato colectivo, que actual mente está “paralizado”, así como la destitución de la rectora Julieta Castellanos.
Como medida de presión, los sindicalistas mantienen cerrados los portones de la UNAH, para impedir el ingreso de los vehículos al campus universitario en Tegucigalpa.