Movistar anunció que realizó una alianza reciente con Starlink para ofrecer internet de alta velocidad en México, en una jugada comercial que demuestra una vez más, que, si no existe forma de competir en el mercado, la mejor alternativa es aliarse con los competidores.
¿En qué consiste la jugada comercial de Movistar con Starlink?
Recientemente, mediante un comunicado de prensa, la compañía española Telefónica, a través de su filian Telefónica México, anunció que cerró un acuerdo con Starlink, la compañía de Elon Musk, para comenzar a ofertar servicios de Internet en México.
Desde sus humildes comienzos en España, Telefónica se ha convertido en una de las compañías líderes en el ámbito global de las telecomunicaciones. Fundada en 1924, esta empresa ha pasado de ser una entidad estatal a una corporación multinacional con presencia en decenas de países. Durante el siglo XX dio testimonio de su capacidad para adaptarse, innovar y superar desafíos en un mercado en constante cambio.
Bajo la marca comercial Movistar, introducida en 1995, Telefónica ha fortalecido su imagen y expandido su alcance, ofreciendo soluciones que van más allá de la simple comunicación telefónica.
Si bien hoy Movistar es sinónimo de conectividad, entretenimiento y servicios digitales de vanguardia, para nadie es un secreto sus dificultades económicas presentes y su incapacidad para ser más competitiva en el hostil mercado de las telecomunicaciones, en donde la aparición de nuevos jugadores con gran músculo financiero, están causando cambios inesperados en el tablero de juego.
Una alianza estratégica
En un evidente intento por encontrar relevancia en un mercado de telecomunicaciones cada vez más complejo y competitivo, Telefónica, a través de su unidad de negocios Telefónica Global Solutions (TGS), anunció recientemente su alianza con Starlink[1], la subsidiaria de SpaceX. Este movimiento deja claro que, a pesar de su historia y presencia en Hispanoamérica, Movistar reconoce su incapacidad de competir individualmente con la innovación y potencial financiero de empresas como SpaceX, especialmente cuando se trata de proporcionar conectividad de alta velocidad en áreas rurales.
Starlink, con su constelación de satélites de órbita terrestre baja (LEO), ha revolucionado el acceso a Internet de banda ancha, ofreciendo velocidades y latencia inimaginables en las zonas más apartadas del mundo. A pesar de haber lanzado sus soluciones empresariales apenas este año, la empresa ya promete velocidades de hasta 300-350 Mbps de descarga, algo con lo que Movistar simplemente no puede competir por sí sola.
En palabras del CEO de Telefónica Global Solutions, Julio Beamonte, «la industria satelital está experimentando una revolución sin precedentes[2]«.
Sin embargo, más allá del entusiasmo que intenta transmitir, estas palabras podrían interpretarse como una admisión implícita de que Movistar necesita aliados más potentes para seguir siendo relevante en un mercado que cambia rápidamente.
La operación, que ha comenzado en México, se extenderá a otros países en los próximos meses. Aunque esto podría sonar como una oportunidad para Movistar de reconquistar territorios perdidos, para muchos podría parecer una estrategia tardía y desesperada. Si bien las alianzas son comunes en el mundo de los negocios, el alineamiento de una empresa establecida como Movistar con un competidor emergente y dominante como Starlink, destaca la complejidad del panorama actual de las telecomunicaciones.
Aunque este acuerdo permite a Movistar añadir las ofertas de Starlink a su porfolio, hay que preguntarse si es suficiente para asegurar un futuro sostenible para la empresa en la era de la conectividad satelital.
Una alianza que también favorece a Starlink
Starlink, la visionaria empresa satelital de Elon Musk, se ha establecido rápidamente como una de las soluciones líderes para llevar internet de alta velocidad a los rincones más remotos del mundo. Gracias a su ambiciosa constelación de satélites en órbita terrestre baja, Starlink no solo proporciona conectividad, sino que garantiza una latencia mínima y un servicio inigualable.
Elon Musk, el emprendedor detrás de exitosos proyectos como Tesla y SpaceX, ha diseñado Starlink para redefinir las telecomunicaciones. Sin embargo, para consolidarse en mercados tan diversos y complejos como los de Latinoamérica, requiere de alianzas estratégicas.
Movistar juega un papel clave en esta ecuación. La colaboración en marcha entre Starlink y la marca insignia de Telefónica permitirá a Musk y su equipo solidificar su presencia en mercados latinoamericanos. La extensa red y experiencia de Movistar en la región, combinada con la avanzada tecnología de Starlink, podría acelerar los indicadores de conectividad en toda la región.
En Conclusión, la alianza entre Movistar, una marca consolidada en telecomunicaciones, y Starlink, una emergente potencia en conectividad satelital de SpaceX, refleja una adaptación estratégica al convulsionado mercado de las comunicaciones en el siglo XXI.
Mientras Starlink expande su revolucionaria tecnología de satélites de órbita terrestre baja, Movistar busca fortalecer su oferta en áreas rurales y remotas. Esta colaboración permite a Movistar competir con conectividad de alta velocidad, algo que individualmente podría resultar desafiante ante las innovaciones de SpaceX. La unión es una combinación de experiencia y vanguardia, una jugada que busca asegurar la relevancia y expansión de ambas compañías en el cambiante mundo de las telecomunicaciones
[1] https://www.telefonica.com.mx/prensa/2023/agosto/telefonica-amplia-la-conectividad-para-las-empresas-en-todo-el-mundo-a-traves-de-starlink/
[2] https://www.telefonica.com.mx/prensa/2023/agosto/telefonica-amplia-la-conectividad-para-las-empresas-en-todo-el-mundo-a-traves-de-starlink/