Tegucigalpa– El gobierno y la empresa privada deben de buscar una solución favorable a la crisis que enfrenta la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), porque la empresa estatal no solo va a quebrar, va arrastrar al gobierno, porque tiene el potencial de poner de rodillas a todo un país, advirtió el exgerente de la institución, José Manuel Arriaga Yacamán.
El exfuncionario lamentó que una empresa como la estatal eléctrica esté pasando por problemas de insolvencia al igual que la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel), donde la diferencia está que Hondutel se puede cerrar mañana y no pasa nada, pero la ENEE se cierra y se paraliza todo el país, porque es la empresa más grande y más importante que tiene Honduras.
Detalló que el gobierno, la empresa privada y la población deben de centrar su mirada en la ENEE, porque es la empresa que mueve Honduras y desafortunadamente está en una situación económica muy crítica que se ha venido agravando en los últimos 10 años, en donde no se han dado los correctivos necesarios.
La crisis económica de la ENEE es grave, tiene un déficit grande que va creciendo año con año, reiteró.
Agregó que se contrató una empresa para solventar el problema de las pérdidas desde hace ya cuatro años y lo que se ha logrado es un incremento en las pérdidas del 36 por ciento.
Las instituciones estatales reconocen que las pérdidas técnicas llegan hasta un 15 por ciento, por lo que hay un 21 por ciento de lo que la ENEE compra de energía y produce no se factura, no se cobra, lo que hace que la institución pierda a finales de año entre ocho y 10 mil millones de lempiras, arguyó.
Sostuvo que una empresa con pérdidas millonarias difícilmente puede sobrevivir y desafortunadamente la ENEE tiene que sobrevivir para que Honduras lo pueda hacer también.
Señaló que hay otras situaciones que se ha venido dando con la misma empresa que se le dio la tercerización de la distribución, la cobranza se le dio en siete mil millones y las cuentas por cobrar ya llegan a los 11 mil millones de lempiras, lo cual es dramático porque no se está cobrando lo que la empresa factura.
Asimismo, dijo que el proyecto Patuca III debió entrar en funcionamiento desde hace dos años y hasta la fecha no está funcionando, esto hace que la ENEE deje de recibir más de mil millones de lempiras anuales que oxigenarían las finanzas de la estatal eléctrica, por lo que tiene que seguir comprando energía para suplir la necesidad en Olancho.
Aseguró que el problema de la ENEE es integral y hay que atacar integralmente y no se ve como solventar esta problemática.
“Hace poco se les pagó a los generadores y en este momento ya se les debe cuatro meses nuevamente, el gran problema es que no se han reducido las pérdidas que se dan por hurto y por algunas líneas sobrecargadas y que se pierde gran parte de la energía porque no hay inversión ni en transmisión, ni en distribución en los últimos años, por lo que se llega a la misma cantidad del déficit”, criticó.
En su opinión, los procesos de licitación se están haciendo cuando ya se están venciendo los contratos, en esa situación se requiere la energía en un corto tiempo por lo que no hay tiempo para que las empresas que vienen de afuera no puedan participar en los mismos con mejores precios.
“Si hoy se empezará con una nueva etapa en la ENEE se iniciaría con un programa masivo de reducción de pérdidas, habría que tener por lo menos 150 cuadrillas realizando trabajo casa por casa, instalando medidores, revisando los contadores trastocados para poder cobrar lo que realmente se debe”, sostuvo.
Agregó que “en la calle lo que hay es un carnaval, porque la empresa que se contrató no está haciendo las funciones y no está controlando a los usuarios que hurtan la energía”.
Recomendó hablar con los organismos internacionales como adecuar la deuda y poner en funcionamiento Patuca III y empezar a percibir fondos, igualmente, tener una mejor administración con mayor personal técnico que es el que labora en los sectores de distribución y transmisión.
(ir)
