Dos comunicados emitidos por la DIECP dan cuenta que Arita Aguilar presentó su renuncia irrevocable al puesto y además desvirtúa que se haya dado por falta de apoyo logístico y económico, así como por amenazas a muerte.
A tempranas horas trascendió en diferentes versiones de prensa que la salida de Arita Aguilar obedecía a la falta de apoyo gubernamental para llevar a cabo la misión que se le encomendó.
El comunicado agrega que la renuncia es por razones estrictamente personales.
También aclaran los comunicados que el gobierno a través de la secretaría de Finanzas ha realizado las transferencias necesarias, de modo que la institución no adolece en este momento de limitaciones financieras que restrinjan su operatividad.
Finalmente exponen que la renuncia del abogado Arita no altera en nada el proceso de estructuración de esta nueva institución ni la depuración policial, en consonancia con el mandato legislativo y las aspiraciones de la ciudadanía hondureña de contar con una Policía garante de la seguridad pública y respetuosa de los derechos humanos.