Tegucigalpa – Ciudadanos de todos los estratos sociales llegaron este día a despedir el cuerpo del periodista Jonathan Roussel, a quien le tributaron un sentido homenaje en su último adiós.
Su cuerpo fue velado en la funeraria San Miguel Arcángel de la colonia Alameda de la capital hondureña, desde donde partió a la Basílica de Suyapa. Ahí se vivieron momentos emotivos por parte de sus familiares, amigos y colegas periodistas.
Durante la misa de cuerpo presente, Milton Roussel, hijo mayor de don Jonathan, agradeció la concurrida asistencia a las honras fúnebres de su padre, donde se contaron innumerables anécdotas y pasajes de la vida del legendario comunicador hondureño.
Uno de los momentos más emotivos fue la llegada de Roxana -hija de Roussel y residente en EEUU- quien a último momento ingresó a la Basílica y se arrojó al ataúd que guardaba los restos de su padre. El momento concitó la atención de los asistentes y arrancó más de algún aplauso que retribuyó su esfuerzo.
De su lado, el analista nacional Miguel Cálix habló en nombre de los amigos de “Don Jona” -como le conocían a Roussel-. Su participación sirvió para esbozar las cualidades de este gran hombre que deja un legado a varias generaciones de periodistas.
También estuvieron en la misa otros comunicadores de la vieja guardia, tal es el caso de: Nahún Valladares, Adán Elvir, Luis Edgardo Vallejo, Edgardo Melgar, Blanca Moreno, entre otros.
Personajes de la vida política, amigos personales, conocidos ciudadanos de la sociedad y gente humilde formó parte de la misa en honor a Jonathan Roussel.
La esposa del extinto periodista, Carmen María y todos sus hijos mostraron la unidad familiar que ha perdurado a lo largo de los años y que en este momento difícil no sería la excepción.
El exmagistrado de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Rolando Arriaga, llegó desde la ciudad industrial de San Pedro Sula para acompañar las honras fúnebres y se jactó de ser uno de los mejores amigos de Jonathan Roussel.
El homenaje gremial estuvo a cargo del presidente del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), Dagoberto Rodríguez, quien leyó un acuerdo de duelo que luego se entregó a la familia.
El cuerpo de Roussel fue trasladado mediante un cortejo fúnebre hacia el cementerio Santa Cruz Memorial para profesarle el último adiós.
El abogado Rolando Arriaga, uno de los entrañables amigos del periodista
Jonathan Roussell junto a la premio nacional de periodismo Blanca Moreno,
otra de las cercanas amigas del extinto.Todos los asistentes coincidieron en el don de gente, la bondad y buen humor que derramaba “Don Jona” y concluyeron que era una mente preclara y un hombre bien formado. ¡Descanse en paz Jonathan Roussel!
