Tegucigalpa – El sacerdote Ismael Moreno, conocido como el padre Melo, pidió al Ministerio Público investigar si la reunión de Carlos Zelaya hace 11 años con personajes del narcotráfico, se trató de un error o un delito, asimismo si solo fue una o varias veces.
– Escuchen al pueblo que está indignado, que tiene ira y también miedo, llevamos muchos años advirtiendo que más del 80 % de la población hondureña no cree en los políticos, señaló el padre Melo.
“Hay que investigar, creo que es importante que hayan procesos profundos de investigación, para ver por ejemplo si el error de don Carlos Zelaya fue un error o un delito, y si además es el único error o el único delito en el caso que así se defina, y si además son varios errores o varios delitos, si fueron parte de un proceso de algún modo que tienen envuelto a diversas personas, no solamente de una familia, sino de otras, y qué vínculos hay con otras familias u otras estructuras partidarias”, describió en entrevista con la radio HRN.
Dijo que quedarse en el chisme o en el lamento no abona en nada a la institucionalidad del país.
El padre Melo reflexionó que sin la CICIH es prácticamente imposible que se pueda avanzar hacia una justicia que le haga frente a las redes de corrupción y criminalidad porque muchas de ellas forman parte de cúpulas que conducen al país.
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Igualmente, solicitó a la presidenta Xiomara Castro que se reactive el tratado de extradición.
Acentuó que asegurar elecciones limpias y transparentes es vital para que haya alternabilidad en el poder de la nación.
El sacerdote jesuita, caviló que si no se hace nada al respecto se fortalece la impunidad y se sigue creyendo que los asuntos se resuelven con negociaciones entre cúpulas y con taparle el ojo al macho. “Esta situación nos lleva a mayor inestabilidad, no se trata de estar a la defensiva ni creer que sólo los otros son culpables”, adicionó.
Llamó a ejecutar una investigación a fondo que guíen al país a escenarios de luz.
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“Confiemos en que el Ministerio Público va actuar en correspondencia a su función, es decir en plena independencia de la política partidista y de las cúpulas del tripartidismo. El Ministerio Público debe actuar absoluta independencia sin miramientos de familiares, amigos y altos dirigentes políticos”, concluyó el sacerdote.
Narcovideo y las negaciones de Carlón
Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta Xiomara Castro, negó por años conocer a los capos de la droga en Honduras. Esto en referencia a los constantes señalamientos que le hacían por presuntamente haber recibido dinero sucio para campañas políticas, así como por ser uno de los principales actores junto a Fredy Nájera en el uso de la pista El Aguacate en Olancho para el envío de drogas a Estados Unidos.
“Carlón”, como le conocen al también hermano del expresidente Manuel Zelaya, se adelantó a la publicación del video que se divulgó esta semana por Insight Crime, pero que ya él había anunciado su renuncia al cargo de diputado al Congreso Nacional.
Su aceptación, 11 años después de la narcoreunión en San Pedro Sula, de haber estado en la cita con importantes capos de la droga, generó un cisma en el Partido Libertad y Refundación (Libre) que fue acompañada con la dimisión de su hijo, José Manuel Zelaya, como ministro de la Defensa, cargo que luego fue conferido a la también precandidata presidencial, Rixi Moncada.
Desde la propia pareja presidencial han condenado la reunión de Carlos Zelaya con narcotraficantes y han reiterado que se ejecutó “a sus espaldas y sin consentimiento”, mientras otros prominentes dirigentes del Partido Libre han expresado que se trata de actuaciones individuales que deben ser juzgadas de forma individual.
Marcha de las antorchas
La primera Marcha de las Antorchas realizada contra la administración de Xiomara Castro convocó a cientos de hondureños la tarde-noche del viernes en la capital hondureña.
El llamado del Ejército Ciudadano de Paz para reactivar el movimiento ciudadano fue atendido por una multitud integrada por jóvenes, hombres, mujeres, personas de la tercera edad, políticos y ciudadanos comunes.
La manifestación inició en la primera entrada de la colonia Kennedy, donde los asistentes portaban banderas de Honduras, de los Estados Unidos y pancartas pidiendo la CICIH, el Tratado de Extradición y pidiendo la renuncia de la presidenta Xiomara Castro.
La leyenda “la mitad para el comandante”, destacó este los mensajes que portaban los hondureños al reactivarse la marcha de las antorchas, en el Bulevar Centroamérica.
El movimiento Por Nuestros Hijos acompañó la actividad, “esta no es una campaña de partidos, de nada, esto es libertad que tenemos que salvar a Honduras, de las amenazas que tenemos”, dijo una de las manifestantes. PD
