Tegucigalpa – Roosevelt Hernández, jefe del Estado Mayor Conjunto hasta este jueves 18 de diciembre, se despidió hoy de las Fuerzas Armadas de Honduras en medio de un discurso triunfalista, pero cuestionado por organismos como la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP)
Hernández ahora adquirió la condición de general en condición de retiro. Durante su despedida dedicó un momento para decirle al periodista Renato Álvarez que no ha expresado ni de su boca, ni de su corazón una intención de dañarlo.
Condenamos enérgicamente la grave amenaza contra el periodista de Honduras Renato Álvarez por parte de Roosevelt Hernández, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas. La intimidación desde el poder es un ataque directo a la libertad de prensa, señaló hoy la SIP.
No obstante, Hernández negó las acusaciones y dijo a los periodistas que no guarda ningún resentimiento.
“De manera pública le expreso al licenciado Renato Álvarez que no he expresado, ni en mi corazón, ni de mi boca la intención de dañar su integridad física o algo mayor. Hemos sido respetuoso con ustedes los periodistas, especialmente los de calle, los independientes y los que hablan con la verdad, siempre tendrán mi aprecio y respeto”, expresó en un acto de respuesta a una solicitud hecha públicamente por el periodista Renato Álvarez.
“Agradezco a los medios de comunicación a aquellos periodistas con quien tuvimos la oportunidad de compartir, de apoyarnos en aras de brindar la información veraz a la sociedad hondureña. No llevo ningún resentimiento con ninguno de ustedes, que públicamente irrespetaron mi persona y la institucionalidad que representamos, irrespetaron mi familia y públicamente me amenazaron en aras de hacerme actuar a su antojo”, discursó.
Recordó que fueron 39 años como miembro de las Fuerzas Armadas de Honduras, cuatro años de formación y 35 años de servicio.
“Gracias al pueblo hondureño porque a través de la institucionalidad de este hermoso país logre fortalecer mi personalidad”, expresó.
Agradeció a la presidenta de la República, Xiomara Castro, así como a sus antecesores y todos los que colaboraron con los distintos programas de las Fuerzas Armadas.
Destacó una serie de programas como el emprendido con la Alcaldía Municipal del Distrito Central (A.M.D.C.) denominado “guerra contra la basura”.
Finalmente, agradeció a Dios y a la Iglesia Católica por apoyarlos y dirigirlos espiritualmente a través del capellán Javier Martínez; también a la Iglesia Evangélica por llevar el evangelio al “corazón del soldado”.
Con la frase “misión cumplida” vitoreada por toda la 27 promoción de las Fuerzas Armadas entregó su cargo y pasó a la condición de retiro. PD
