- Los problemas de Honduras no se resolverán con promesas populistas, dice.
“Yo no creo en soluciones rápidas a los grandes problemas de Honduras, no creo en atajos fáciles, no creo en promesas populistas”, planteó el ex gobernante hondureño en el discurso brindado tras recibir de manos de la presidenta del Banco Central, María Elena Mondragón, la presea “José Trinidad Cabañas”, con la que reconocieron su trayectoria política y empresarial, y su servicio, entrega y defensa a la nación.
En su alocución, Maduro dijo que “el buen futuro se logra con trabajo tesonero y continuo de buenos hondureños, con mejora continua de las instituciones y leyes para encarar los problemas que tenemos, y profundizar nuestra democracia con respeto a nuestra Constitución y las leyes, con seriedad, con consultas y análisis amplios, con respeto a nuestra cultura, nuestras costumbres y nuestra identidad”.
El ex gobernante dijo reconocer que en Honduras “tenemos enormes problemas y retos por delante”, al tiempo que se mostró en desacuerdo “con los pesimistas o alarmistas que insisten en meter a todos los hondureños en el mismo saco de la ignorancia, de la corrupción, del desamor a la patria y de la incapacidad”.
Al contrario, apuntó, “se que somos capaces de forjar un gran futuro y que contamos con las personas para lograrlo: profesionales, campesinos, mujeres y hombres, líderes políticos de todos los partidos, líderes comunitarios y de la sociedad civil, ciudadanos amantes de su patria y sabios en la persecución de un mejor futuro”.
Maduro también recordó que para fortalecerse y tener éxito, la democracia depende de la amplia participación ciudadana, por lo que llamó a participar en los espacios políticos.
“Espero –indicó- que esta ocasión sirva para lograr motivar la participación a muchos otros, pues la democracia, que es el mejor sistema de convivencia social en libertad, exige pagar el alto precio de la participación”.
En su discurso, Maduro agradeció el apoyo internacional a Honduras, el cual, dijo, “sin duda ha sido decisivo en aliviar nuestra deuda externa y en numerosos otros proyectos de mejoramiento y labor social; es sin duda un valiosísimo complemento a nuestros esfuerzos”.
También confió en que Honduras “seguirá siendo un socio y amigo constante en el concierto de las naciones”, pero dijo cuestionar “a aquellos conciudadanos que creen que la ayuda externa puede ser sustituta de nuestro propio esfuerzo y protagonismo”.
“Las soluciones a nuestros problemas deben ser nuestras, no debemos ni podemos soslayar ni delegar en nadie más. La búsqueda, decisión e implementación de la solución a nuestra problemática tiene que ser nuestra. Honduras es un gran país y los hondureños somos capaces de sacarlo adelante con éxito, con equidad y en convivencia pacífica”, aseveró.
Reconoció el esfuerzo del presidente Porfirio Lobo y su equipo para re-unir a nuestra sociedad y emprender el camino para lograr mayor bienestar para los hondureños.
