Lo anterior ante las declaraciones que personalmente hicieran los dirigentes de Salvemos Honduras, Antonio Rivera Callejas y Juan Diego Zelaya, quienes recomendaron al líder de ese movimiento no recurrir a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) porque provocaría una división del partido y una crisis institucional peor que la de 2009.
En ese sentido, Álvarez por medio de un comunicado al pueblo hondureño y al nacionalismo le comunica lo siguiente:
1. Que el máximo líder de nuestro movimiento Ricardo Álvarez respeta las opiniones individuales de cada uno de los miembros de su movimiento.
2. Que ninguno de sus miembros está autorizado para realizar negociaciones de ninguna naturaleza a nombre de Salvemos Honduras.
3. Que como principio fundamental Ricardo Álvarez considera que la voluntad del pueblo nacionalista expresada libremente en las urnas no se negocia y se respeta.
4. Que la razón de nuestra existencia está ligada a los grandes intereses de la mayoría de los hondureños y de los nacionalistas en particular. Velar por su bienestar por el derecho a salir de la pobreza por la democracia y esencialmente por la justicia, son y serán permanentemente nuestros ideales.
5. Que creemos en el compromiso de construir Honduras sobre bases sólidas y tras ese principio seguiremos avanzando juntos, al lado de miles de nacionalistas que creen en nuestra propuesta y a los que agradecemos su respaldo y compromiso con la causa que es de todos.
