Tegucigalpa- La Red por la Equidad y la Democracia de Honduras (REDH), con experiencia en observación electoral desde 2008, expresó a través de un comunicado que es urgente construir consensos que devuelvan legitimidad al proceso electoral y generen un ambiente de armonía, evitando el ciclo de incertidumbre, confrontación y violencia que ha marcado las últimas elecciones.
–El país necesita propuestas, no discursos de odio.
La REDH dejó ver su profunda preocupación ante el grave deterioro institucional del Consejo Nacional Electoral (CNE), cuyo funcionamiento se encuentra prácticamente paralizado debido a presiones partidarias, injerencias de otros poderes del Estado y la confusa renuncia de una consejera propietaria.
Esta crisis no sólo amenaza el calendario electoral del 30 de noviembre, sino que socava la confianza ciudadana en el proceso democrático, señaló el pronunciamiento.
Desde la transición democrática en 1980, el pueblo hondureño aspira a instituciones fuertes, a la independencia de poderes y al respeto del Estado de Derecho. Hoy reafirmamos que el CNE debe ser un órgano autónomo, con autoridad técnica, libre de presiones e intimidaciones, para garantizar elecciones íntegras, transparentes y confiables, indicó.
En ese sentido, la REDH exhortó a los partidos políticos y sus liderazgos, a deponer intereses particulares. Es urgente construir consensos que devuelvan legitimidad al proceso electoral y generen un ambiente de armonía, evitando el ciclo de incertidumbre, confrontación y violencia que ha marcado las últimas elecciones. El país necesita propuestas, no discursos de odio.
Condenamos enérgicamente los recientes actos de violencia política, incluyendo la represión frente al Congreso Nacional, la obstrucción de labores en el CNE, y toda amenaza o agresión contra liderazgos -especialmente contra mujeres en política-.Demandamos de las fuerzas de seguridad, un comportamiento imparcial, respetuoso de los derechos de todas las personas, y apegado a la Constitución.
La crisis actual no puede resolverse con más polarización ni imposiciones. La competencia política es legítima, pero debe ejercerse dentro de los marcos democráticos. Cualquier intento de alcanzar el poder por vías violentas o al margen de la ley, es inaceptable y daña profundamente al país, señaló.
La REDH coincide con el llamado de la Misión de Observación Electoral de la OEA: Honduras necesita un proceso “justo, transparente y confiable”. La intervención del Ministerio Público en el CNE, lejos de abonar a este objetivo, profundiza la crisis institucional y se percibe como una acción con motivación política.
“Hoy más que nunca se requiere voluntad política, responsabilidad institucional y liderazgo ciudadano. Desde la REDH reafirmamos nuestro compromiso con una democracia participativa, respetuosa y plural. Invitamos a todas las fuerzas vivas del país a apostar por el diálogo, la legalidad y la armonía como base para elecciones legítimas y un mejor futuro para Honduras”, manifestó.
La REDH hizo un respetuoso, pero claro llamado a la comunidad internacional, en particular a los organismos multilaterales y misiones de observación, para que acompañen este proceso con firmeza, tal como lo hicieron en su momento en Guatemala.
“Hoy, Honduras necesita ese mismo respaldo para proteger su gobernabilidad democrática. Su vigilancia y acompañamiento, son vitales para encauzar esta crisis por la vía del respeto institucional y la paz social”, concluyó el pronunciamiento. IR