Tegucigalpa – Con el propósito de detectar de manera temprana el contagio del virus COVID-19 en las personas privadas de libertad que conviven en los centros penitenciarios de Tela, Atlántida y Puerto Cortes, Cortés; personal de las Regiones Sanitarias de la Secretaría de Salud (Sesal), visitaron las instalaciones para aplicar pruebas de hisopado.
– En conjunto con la Sesal se realizan intervenciones sanitarias en los establecimientos a nivel nacional.
Las autoridades de los establecimientos informaron que en el recinto de la ciudad de Tela se realizaron 21 pruebas de hisopado, mientras que en el de Puerto Cortés se aplicaron 29, esta acción es para mantener un muestreo de la situación del virus en los establecimientos penitenciarios, acción que se repite a nivel nacional.
Afirmaron, que en el presente año se mantienen 47 casos activos, los mismos están distribuidos en diez establecimientos penitenciarios en donde las personas contagiadas permanecen en zonas de aislamiento, bajo monitoreo médico y con el debido tratamiento para disminuir la carga viral. Se contabilizan 38 recuperados.
Antecedentes
En el 2020, las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP), a través de la Unidad de Salud reporto 2 mil 686 casos de COVID- 19 en los centros penitenciarios a nivel nacional de los cuales se logró la recuperación de 2 mil 624; esto representa una tasa de recuperación del 98.1, se contabilizó cinco fallecimientos confirmados mediante prueba PCR, en algunos casos se les realizó después del deceso.
Para atender la emergencia decretada por la pandemia provocada por el virus COVID-19, las autoridades penitenciarias giraron instrucciones para habilitar en cada establecimiento las zonas de aislamiento para las personas de primer ingreso para detectar cualquier tipo de sintomatología. También se habilitaron áreas para las personas contagiadas y así brindarles la atención médica requerida.
Asimismo, las autoridades instalaron un laboratorio en el Centro Penitenciario Nacional de Támara (CPNT) para procesar muestras de química -sanguínea y así monitorear el sistema inmunológico de las personas privadas de libertad de ese establecimiento y de la Penitenciaria Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS).
En el CPNT se habilitó una clínica para atender Consulta Externa, también se adquirió medicamento para las personas privadas de libertad que padecen de enfermedades crónicas, se compró tratamiento “MAIZ” para disminuir la carga viral en personas contagiadas y se coordino con algunos hospitales para el suministro de tratamiento para las personas diabéticas y con enfermedades mentales.
JS
