Tegucigalpa – Debido al hedor que emanan de los cadáveres en descomposición de los presos calcinados en el incendio que se produjo la noche del martes en la granja penal de Comayagua, las autoridades determinaron prohibir a la prensa permanecer en las proximidades donde se realizan las autopsias e identificación de los internos fallecidos en la conflagración.
Así lo informó esta noche, el portavoz de la Morgue Judicial del Ministerio Público, Carlos Vallecillo quien indicó que se ha solicitado a las autoridades del Ministerio de Salud la dotación de disolventes y otros químicos a fin de contrarrestar la fetidez.
Señaló que 25 médicos y patólogos forenses hondureños trabajan en la ardua labor de identificar los cuerpos de los reclusos a los cuales se han unidos especialistas de México, El Salvador y Chile, entre otros.
Vallecillo detalló que hasta el momento se han identificado plenamente 12 cadáveres, de los cuales 6 ya fueron entregados a sus familiares.
Indicó que la identificación de los más de 300 cuerpos que aún permanecen en la morgue capitalina depende del volumen de las quemaduras, las muestras biológicas y las pruebas de ADN.
Esta noche las autoridades de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Ministerio Público y otras, se encuentran reunidas para tomar medidas respecto al manejo del área donde se practican las necropsias, donde la descomposición de los cadáveres ha generado un hedor que comienza a ser insoportable.
En ese sentido, una de las primeras medidas es prohibir la presencia de los periodistas en las proximidades de la morgue capitalina.
Asimismo, se ha designado al titular de Copeco, Lisandro Rosales, para que sea el vocero oficial, quien ofrecerá dos conferencias de prensa diarias para informar como marcha el proceso de identificación de los desafortunados reclusos que murieron calcinados en la cárcel de Comayagua.
