Tegucigalpa – La exrectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, manifestó que el desarrollo de las elecciones primarias ha sido un proceso desafortunado, dramático y bochornoso.
Señaló que en el pasado no se había tenido un desempeño dudoso de las Fuerzas Armadas en un proceso electoral.
Castellanos lamentó que la situación abarque el Consejo Nacional Electoral (CNE) con las discrepancias y disputas del poder.
“Aquí tendrá que haber una investigación de fondo, hubo una interrupción del proceso electoral, detuvieron o no se emitió una votación, se tardaron 12 horas para que comenzara y esto tiene un nombre ‘obstrucción electoral’ es un atentado contra el proceso electoral”, declaró Castellanos.
Señaló que las Fuerzas Armadas han pagado un alto costo y que están bien legitimada los señalamientos de su implicación en el retraso de la entrega del material electoral el domingo.
Castellanos contó que ella participó en las elecciones primarias como observadora de la Red por la Defensa de la Democracia (RDD) siendo “testigo de primera línea” de la no llegada del material electoral.
Indicó que el reclamo a las Fuerzas Armadas es el abandono en su misión de transportar, custodia y vigilar el material electoral.
Asimismo, mencionó que las autoridades del Consejo Nacional Electoral (CNE) no pueden emitir pronunciamientos sin tener el escrutinio final de que partido político sacará más votos.
“Es muy arriesgado e irresponsable que una autoridad electoral empiece a emitir opiniones sobre qué partido sacará más votos en una elección primaria”, puntualizó.
Instó a las autoridades a que sean prudentes, responsables y tengan respeto al elector y la ciudadanía.
Castellanos admitió que la responsabilidad de esta crisis de las Fuerzas Armadas surgió con la presidenta Xiomara Castro cuando nombró a Rixi Moncada como ministra de Defensa, sabiendo que era la precandidata presidencial del oficialismo.
“Había un conflicto de intereses que les pasará factura al Estado y al Partido Libre”, vaticinó.
Sobre los resultados en los tres partidos políticos, indicó que están parejos en la divulgación de actas.
Señaló que los tres partidos políticos han inflado votos, pueden alterar resultados y nadie puede constatarlos porque manejan las elecciones primarias.
No obstante, analizó que el Partido Libre perdió cuatro caudales de votos: los que atraía Salvador Nasralla, los independientes, los liberales y los jóvenes.
“Nadie les va a creer que tienen un millón 200 mil votos porque tendría que tener muy satisfecha a la gente”, sentenció. AG