– Además de la Policía Militar, candidato nacionalista propone seguir depurando y fortaleciendo a los operadores de justicia.
“La Policía Militar del Orden Público será clave en mi gobierno en la lucha contra la delincuencia”, dijo Hernández, quien fue el impulsador de la creación de esta nueva fuera de seguridad. “La idea es que llegue a tener un número de cinco mil efectivos en los cuatro años de mi administración”.
En sus cierres de campaña, el presidenciable nacionalista reveló algunas de las ciudades en las que, además de Tegucigalpa y San Pedro Sula, estarían ubicadas las unidades de la Policía Militar: Choluteca y La Ceiba. Otros lugares podrían ser Catacamas y el Bajo Aguán.
Hernández, quien ha lamentado que la candidata de Libre, Xiomara Castro, haya afirmado que una de sus primeras medidas en caso de ganar las elecciones sería eliminar la Policía Militar, pone como ejemplo el éxito que los patrullajes de la misma están teniendo en varios lugares del país.
“Los que quieren eliminar a la Policía Militar deberían ir a las Flor del Campo o la Canaán (colonias de Tegucigalpa), a Juticalpa o la Rivera Hernández, para que vean cómo están de felices los vecinos de esos lugar por la patrullajes de la Policía Militar. Vivían prácticamente secuestrados y ahora han recuperado la libertad”, señaló.
Además de la Policía Militar, el joven aspirante nacionalista está convencido que los soldados de las Fuerzas Armadas deben realizar patrullajes en las calles mientras la Policía Nacional continúa con su proceso de certificación (depuración) y se gana la confianza de la sociedad.
Por cada policía que se somete a las pruebas de confianza, únicamente quedan cien disponibles. A Colombia le tomó más de diez años para volver a tener una Policía fuerte y confiable. Entonces, los soldados deben acompañarnos en este proceso de recuperación de la paz”, pronunció.
Como presidente del Congreso Nacional, Juan Hernández impulsó la depuración de la Policía y hoy, cada miembro de esa institución debe someterse a pruebas de polígrafo o detector de mentiras; al antidoping para descartar consumo de drogas u otras sustancias prohibidas; sicométricas y comparación de los bienes materiales con el salario.
Fue también bajo la presidencia de Hernández que el Congreso Nacional aprobó la Tasa de Seguridad, un mecanismo que permite recolectar fondos para dotar de logística a los operadores de justicia y para construir y reparar canchas deportivas como un método de prevención.
De hecho, se ha comprometido a masificar en su gobierno la construcción y remodelación de canchas tal y como ya ha ocurrido con el estadio “Emilio Larach” de la Kennedy, el de Juticalpa y el de Gracias, Lempira; la cancha del Birichiche.
Juan Hernández, además ha prometido que con los fondos de la Tasa de Seguridad se realizará una electrificación masiva en barrios, colonias, ciudades y pueblos de Honduras para ir recuperando los terrenos que han sido cedidos a los delincuentes.
“Las iglesias Católica y Evangélica están jugando un papel muy importante en programas de prevención con los jóvenes en muchísimos barrios y colonias del país. Para mí es clave que los dirigentes de las comunidades se hagan un nudo con sacerdotes y pastores en esos programas de prevención”, sostiene.
Como promesa de su campaña, es célebre su frase de “Yo, Juan Orlando Hernández, voy a hacer lo que tenga que hacer para que los hondureños recuperemos la seguridad y vivamos en paz; claro, bajo el marco de la ley y de la mano del pueblo hondureño”.
