Tegucigalpa – Porfirio Lobo Sosa, expresidente de Honduras (2010-2014), manifestó este miércoles que dar prestaciones a altos funcionarios es una acción ilegal y que por acciones como esas entre otras solo dejan destruido al Partido Nacional (PN).
En declaraciones a Radio América, el exgobernante hondureño, consideró que el actual gobierno nacionalista está dejando mucho que desear en el cierre de la administración “están dejando a Honduras en un agujero”, recriminó.
“Es lamentable lo que estamos viendo, sería normal que en la transición se sienten ambas comisiones: la del actual gobierno y la del saliente, de manera que todo lo que se haga no comprometa ni vaya en contra de la voluntad del nuevo gobierno”, agregó Lobo Sosa.
Consecuentemente, añadió que hay un sector del Partido Nacional, que no está de acuerdo con la política del presidente Juan Orlando Hernández y su grupo, quienes no aprendieron la lección dada por el pueblo.
Lo anterior, para referirse a la reciente convocatoria para sesión virtual en el Congreso Nacional, cuya intención es aprobar contratos para la Alcaldía del Distrito Central y aumento a salarios de diputados suplentes.
“Me sorprende de la Alcaldía Municipal del Distrito Central, porque yo he tenido un concepto de Nasry Asfura como un hombre recto”, externó, al tiempo para luego cuestionar el pago de prestaciones a funcionarios.
Según Lobo Sosa “un alto funcionario del Estado no recibe prestaciones porque es un empleado de confianza, eso es ilegal e inmoral y traición al pueblo, ese dinero se necesita para atender los diferentes problemas”.
Reconoció que la administración saliente, está demostrando que quiere dejar atado al nuevo gobierno que liderará Xiomara Castro, pero considera que esa situación se puede revertir después del 27 de enero.
“A saber en qué hoyo y deudas sociales y económicas están dejando, o sea que doña Xiomara tiene que revisar todo lo que han hecho; no he visto cosa igual, indigna la inmoralidad y tanta violación a la ley”, dijo.
Y reprochó que las actuales decisiones del gobierno liderado por Hernández Alvarado, se ha encargado de hundir al Partido Nacional porque gobernaron en contra de los intereses de las mayorías.
“Yo jamás estaría en contra del pueblo, (…) no voy a plegarme a un organismo político que está dominando y que ha dejado por el suelo el nombre del Partido Nacional”, exteriorizó. JP
