Washington – El presidente de Honduras Juan Orlando Hernández, se encuentra reunido este jueves la Casa Blanca, con el vicepresidente de Estados Unidos, Michael Richard Pence, en una visita oficial.
Hernández se encuentra desde el lunes en Washington, para sostener encuentros de alto nivel con congresistas, senadores y altos funcionarios de la administración del presidente Donald Trump.
El encuentro con el vicepresidente Pence estaba programado para este jueves a las 8:45 de la mañana hora de Washington (6:45 de la mañana, hora de Honduras) en la Casa Blanca.
Honduras y Estados Unidos mantienen históricas relaciones de cooperación y amistad que han sido fortalecidas en los últimos años.
Actualmente más de 57 mil hondureños están acogidos al Estatus de Protección Temporal (TPS), iniciativa que les permite residir y trabajar legalmente en Estados Unidos hasta el 5 de enero de 2018.
En materia de seguridad, Estados Unidos ha aceptado su responsabilidad compartida pero diferenciada en temas sensibles como el narcotráfico, flagelo que en Honduras ha sido el mayor generador de violencia.
Para enfrentar los desafíos que alientan la migración irregular hacia Estados Unidos, Honduras propuso a los países del Triángulo Norte diseñar el Plan de la Alianza para la Prosperidad que promueve y articula acciones en un plazo de cinco años (2016-2020).
Estas acciones van encaminadas a buscar la paz y erradicar la violencia, generar empleo, competitividad y productividad, desarrollo humano, reducción de desigualdades y protección social. Además hay un fuerte componente para la transparencia y modernización del Estado.
El fenómeno migratorio cobró especial relevancia en el 2014 con el incremento significativo del flujo de menores de edad (casi 18,000 niños hondureños) que arribaron irregularmente y sin el acompañamiento de un adulto a los Estados Unidos.
El Congreso de Estados Unidos aprobó en diciembre de 2015, al menos 750 millones de dólares para la Estrategia de Relacionamiento de los EEUU con Centroamérica en apoyo al Plan. En enero de 2017 llegaron a Honduras los primeros fondos de apoyo a la Alianza, aprobados en el presupuesto de EEUU de 2016, por un monto de 125 millones de dólares.
