Tegucigalpa – Las declaraciones del jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas (FFAA), general Roosevelt Hernández, en las que asegura que ese cuerpo castrense es “un instrumento del poder político” y que están sujetos a la ejecución de las políticas públicas del gobierno en turno, dispara las alarmas a grupos de activistas democráticos.
Mediante un comunicado público firmado por Defensores de Honduras, Reserva Militar Nacional, Consejo Patriótico de la Sociedad Civil y organizaciones democráticas en defensa del orden constitucional, expresan su profunda preocupación por el peligroso desvío institucional que las afirmaciones expresadas por el jefe de las FFAA.
“Reducir su papel a un simple ‘instrumento’ del poder político es una grave amenaza a la democracia, al equilibrio entre los poderes del Estado y a la voluntad soberana del pueblo hondureño”, resalta la comunicación oficial.
Advierten que cualquier subordinación de las Fuerzas Armadas a intereses de partido o ideologías constituye una desviación de su mandato constitucional y podría configurar delitos graves como el abuso de autoridad, la prevaricación militar, la sedición e incluso la traición a la patria, conforme al Código Penal vigente.
Las declaraciones del general Roosevelt fueron proporcionadas el lunes de esta semana al medio televisivo UNEtv.
A continuación el comunicado íntegro:
COMUNICADO OFICIAL A LAS FUERZAS ARMADAS DE HONDURAS
A la opinión pública nacional e internacional, a las instituciones democráticas del país, a los miembros activos y en condición de retiro de las Fuerzas Armadas, a la sociedad civil organizada y a los medios de comunicación:
Ante las recientes declaraciones públicas emitidas por el actual Jefe del Estado Mayor Conjunto, General Roosevelt Hernández, en las cuales afirma que las Fuerzas Armadas de Honduras son «un instrumento del poder político» y que están sujetas a la ejecución de las políticas públicas del gobierno en turno, expresamos nuestra profunda preocupación por el peligroso desvío institucional que tales afirmaciones representan.
La Constitución de la República, en su artículo 272, establece con absoluta claridad que las Fuerzas Armadas son una institución nacional, permanente, profesional, apolítica, obediente y no deliberante, cuya función primordial es defender la soberanía e integridad territorial, el orden constitucional y el Estado de Derecho.
Reducir su papel a un simple «instrumento» del poder político es una grave amenaza a la democracia, al equilibrio entre los poderes del Estado y a la voluntad soberana del pueblo hondureño. Esta visión contradice abiertamente la Carta Magna y abre la puerta a la instrumentalización de la institución armada para fines partidarios, como ha ocurrido en regímenes autoritarios de la región.
Advertimos que cualquier subordinación de las Fuerzas Armadas a intereses de partido o ideologías constituye una desviación de su mandato constitucional y podría configurar delitos graves como el abuso de autoridad, la prevaricación militar, la sedición e incluso la traición a la patria, conforme al Código Penal vigente.
Llamamos a los oficiales subalternos y a toda la cadena de mando a mantener la lealtad a la Constitución y al pueblo hondureño, no a personas o ideologías. El respeto al orden legal es el único camino para preservar la institucionalidad, la paz y la democracia.
Reafirmamos que Honduras necesita Fuerzas Armadas firmes, independientes, comprometidas con la legalidad y al servicio exclusivo del interés nacional.
Dado en la ciudad de Tegucigalpa, Honduras 16 de noviembre 2025.
Firmado por:
DEFENSORES DE HONDURAS
RESERVA MILITAR NACIONAL
CONSEJO PATRIÓTICO DE LA SOCIEDAD CIVIL
ORGANIZACIONES DEMOCRÁTICAS EN DEFENSA DEL ORDEN CONSTITUCIONAL