- Relata vía crucis de un grupo de indocumentados centroamericanos, varios de ellos hondureños, que fueron atacados a tiros por policías mexicanos, cuando viajaban a bordo de un camión.
El medio de comunicación deja al descubierto los riesgos a los que se enfrentan los miles de indocumentados centroamericanos a su paso por el territorio mexicano.
En su edición del 4 y 5 de agosto, el medio de comunicación informa sobre el accidente de un camión de indocumentados de centro y sur América, ocurrido la madrugada del lunes pasado en el sector de Agua Dulce, en el que perdieron la vida tres personas, uno de ellos un joven colombiano que antes de morir relató lo sucedido a la cónsul de Honduras en Veracruz, María Luisa Vallecillos Gómez, y a la presidenta de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, Noemí Quirasco Hernández.
En una nota fechada el 4 de agosto dan cuenta de que “un botín mal repartido, producto de la extorsión a migrantes centroamericanos, fue el motivo que provocó la ejecución de dos indocumentados y se hiriera a más de 30 por parte de elementos policíacos municipales de Agua Dulce, que habrían dado la ley fuga para después rociarlos de balas cuando viajaban a bordo de un camión torton”.
En el hecho ocurrido la madrugada del lunes resultó herido Eblin Simón Velázquez Pacheco procedente del departamento de Olancho, Honduras, dice la publicación.
En una notadel 5 de agosto, relatan que otro hondureño que resultó herido en el mismo hecho y a quien identifican como José Victorino Hernández de 40 años de edad, está grave en el Hospital Regional de Veracruz.
El grupo de indocumentados del que formaban parte los hondureños fue agredido por policías municipales de Agua Dulce, según el relato de sobrevivientes salvadoreños al cónsul de su país en Veracruz, Eirving Ortiz Luna.
La cónsul general de Guatemala en Veracruz, Julia Guzmán Osorio, exhortó a las autoridades a investigar a fondo el accidente.
En su edición de hoy, el periódico digital también cuenta la historia de la hondureña Glendi Vanesa Anahí Zúñiga, quien A pesar de haber sufrido la mutilación de un pie al caerse del tren dice que no pierde la esperanza de de llegar a Estados Unidos para alcanzar el sueño americano.
Zúñiga, al igual que sus compatriotas víctimas del atentado de los policías mexicanos, forma parte de un fuerte contingente de hondureños que a diario salen del país en busca del “sueño americano”, el cual, en la mayoría de las veces, se convierte en la peor pesadilla de sus vidas.
Muchos de los que sortean las dificultades del largo camino, son detenidos en territorio estadounidense y deportados a sus países de origen con lo que andan puesto, según sus testimonios.
Según estadísticas oficiales, en lo que va del año 2008, al menos 17,600 hondureños han sido deportados por la vía aérea desde Estados Unidos.