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Portero hondureño Mendoza en libertad bajo fianza acusado por agresión en Guatemala

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Guatemala – Los ocho jugadores del equipo Xelajú de la Liga Nacional de Fútbol de Guatemala acusados de agredir a otro futbolista del club, quedaron hoy en libertad bajo fianza y ligados a proceso judicial, horas después de que se entregaran voluntariamente a las autoridades.
 

Entre los implicados en el caso están los brasileños Israel Silva y Juliano Rangel, el costarricense Sergio Morales y el hondureño José Alberto Mendoza, de acuerdo a la información oficial.

Tras la audiencia a puerta cerrada celebrada este lunes en el Juzgado Segundo de Primera Instancia Penal de la ciudad de Quetzaltenango, a 201 kilómetros al oeste de la capital, el juez Félix Sontay resolvió dejar en libertad a los jugadores previo pago de una fianza de 5.000 quetzales (636,13 dólares) cada uno.

Sontay resolvió que los ocho futbolistas se deben presentar cada 15 días al Juzgado a firmar para asegurar su presencia en Guatemala debido a que los arraigó, es decir que no pueden salir del país.

El más perjudicado con este fallo es el brasileño Israel Silva, pretendido por el Saprissa de Costa Rica.

Los ocho jugadores quedaron ligados a proceso judicial, pero podrán entrenar y jugar con su equipo, el Xelajú, que dirige el argentino Héctor Trujillo.

El grupo integrado por Silva y su compatriota Juliano Rangel, el costarricense Sergio Morales, el hondureño José Alberto Mendoza y los guatemaltecos Edgar Chinchilla, Milton Gary Leal, Kevin Eduardo Arreola y Julio Francisco Estacuy, se entregó hoy de forma voluntaria a la justicia.

El portavoz de la Policía, Pablo Castillo, confirmó a Acan-Efe que los futbolistas se presentaron de forma voluntaria a una comisaría de Quetzaltenango y luego de su detención, fueron trasladados al Juzgado.

El grupo es acusado de haber golpeado en diciembre pasado al jugador juvenil Mario Humberto Rodas Ramírez, de 14 años, quien interpuso la denuncia ante las autoridades.

La agresión se produjo cuando Rodas se presentó a entrenar con el equipo mayor y para su sorpresa, según la denuncia, varios jugadores lo esperaban con tijeras y máquinas para raparlo en una especie de «bautizo».

El futbolista dijo que Silva lo agarró del cuello y Sergio Morales se acercó para cortarle el pelo, pero lo empujó y ello enojó al costarricense.

Ante la negativa del jugador a ser «bautizado», los jugadores, según su denuncia, los agredieron y los exámenes médicos realizados determinaron que sufrió lesiones en sus genitales, espalda y rodillas.

El Ministerio Público señala a los jugadores del delito de violencia contra menores.

La semana pasada también fue detenido por el mismo caso William Oroxom, el utilero del Xelajú, pero también quedó en libertad bajo fianza.
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