México.- La Policía Federal de México rescató a 40 migrantes, la mayoría centroamericanos, en tres operativos realizados en el estado de Tamaulipas, en el noreste del país, y capturó a un presunto secuestrador.
La corporación indicó en un comunicado que los agentes inspeccionaban el fraccionamiento San José, ubicado en Reynosa, cuando se percataron que desde la ventana de una casa un grupo de personas solicitaba ayuda.
Los policías ingresaron a la vivienda, donde se encontraban 20 guatemaltecos y salvadoreños que manifestaron haber sido privados de su libertad.
En lugar fue detenido un hombre de 24 años que presuntamente custodiaba el inmueble y al que los agentes decomisaron un equipo de telefonía y documentación.
El segundo operativo se llevó a cabo a partir de una denuncia ciudadana en tres viviendas de la colonia Rancho Grande de Reynosa, donde fueron hallados tres guatemaltecos, cuatro hondureños, un salvadoreño y dos mexicanos.
En la tercera acción, realizada la fronteriza ciudad de Nuevo Laredo, fueron localizados siete mexicanos, dos hondureños y un nicaragüense.
Los indocumentados fueron entregados al Instituto Nacional de Migración (INM), mientras que el detenido se encuentra bajo investigación en el Ministerio Público Federal.
Cada año miles de indocumentados centroamericanos intentan cruzar a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades de vida, pero durante su travesía por México enfrentan el riesgo de caer en manos del crimen organizado o de autoridades corruptas.
El estado de Tamaulipas ha sido durante años escenario de violentos choques entre grupos del crimen organizado, principalmente el cártel del Golfo y los Zetas, y de estos con las fuerzas de seguridad.
También ha sido marcado por atroces crímenes contra indocumentados, entre ellos la matanza de 72 migrantes, la mayoría centroamericanos, ocurrida en agosto de 2010 en el municipio de San Fernando, atribuida a los Zetas.
Ante un recrudecimiento de la violencia, el Gobierno federal implementó en mayo del año pasado una nueva estrategia de seguridad que involucra un despliegue mayor de fuerzas federales y la depuración completa de los cuerpos de seguridad del estado. EFE