San Pedro Sula – En pleno culto, un celoso pistolero irrumpió en una iglesia evangélica de Santa Cruz de Yojoa y asesinó la noche del domingo a tres menores de edad que se encontraban en el interior del templo.
El hecho criminal ocurrió en la iglesia Asambleas de Dios del templo Betania, conocida también como “La Casona” donde el sujeto armado entró y luego protagonizó la balacera donde resultaron muertos los tres menores.
Los fallecidos fueron identificados como Estefany Gáleas de 14 años de edad, Julio César Rivera de 17 años y Bayron Nahúm Orellana de 10 años.
El abuelo de uno de los menores y tío del supuesto hechor, relató que el individuo ingresó armado y por celos mató a los tres menores, aunque dos de ellos quedaron mortalmente heridos, pero fallecieron mientras eran trasladados en ambulancias a un centro asistencial.
Relató que al hechor le gustaba su propia prima Estefany Gáleas y tenía celos de Julio César Rivera quien era el supuesto novio de la adolescente.
El ataque iba dirigido contra Estefany y Julio César, pero las balas alcanzaron a Bayron quien se encontraba sentado junto a las otras víctimas en la última banca del templo evangélico.
Tras cometer el triple crimen el hechor se dio a la fuga con rumbo desconocido aunque su tío indicó que le informaron que lo vieron comprando un churro en uno de los barrios de Santa Cruz de Yojoa.
Por su parte, la madre de Julio César relató que su hijo, quien vive en otra aldea de Santa Cruz de Yojoa, ya había sido amenazado por el hechor.
Añadió que su hijo, quien trabajaba como ayudante de un bus que cubre la ruta entre San Bartolo y Santa Cruz de Yojoa, viajaba frecuentemente hasta ese lugar donde vive una cuñada suya, aunque el sujeto ya lo había amenazado dos veces, pero él le decía que no había problema porque estaba enamorado de Estefany Gáleas.
Según testigos, el asesino responde al nombre de Ivis Gáleas quien antes de cometer el crimen fue visto ingiriendo bebidas alcohólicas y fumando marihuana.
La Policía ha montado operativos para tratar de capturar al hechor y ponerlo a las órdenes del Ministerio Público.
