Misael Argeñal, un importante conductor de la Iglesia Evangélica en el norte de Honduras, soportó en carne propia las acciones de la delincuencia.
Hace un par de años el pastor Argeñal fue asaltado en una carretera donde además sufrió agresiones de sus victimarios.
Asimismo, tanto él como su familia han sido víctimas de constantes amenazas a través de mensajes y llamas telefónicas.
Hace unos días la esposa de Misael Argeñal sufrió un secuestro “expreso”.
Posterior a esa acción se desató un campaña de intimidaciones en su contra y de los miembros de su familia de agudizó.
Las amenazas hicieron que el reverendo evangélico determinará marcharse de la norteña ciudad de San Pedro Sula, donde habitaba junto a su familia, hacia los Estados Unidos, confirmó este domingo el gobernador Gabriel García Ardón.
García Ardón lamentó la partida del líder religioso y dijo que se trata de un exilio debido a la ola de violencia que enfrenta esta nación centroamericana.