Asunción – Paraguay declaró una alerta epidemiológica ante el repunte de los casos de chikunguña, que ascendieron a 1.460 al concluir 2022, muy por encima del dengue, que cerró el año pasado con un total de 362 afectados, informó el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
Consultada por EFE, Viviana de Egea, de la Dirección de Vigilancia de Enfermedades Transmisibles, indicó este miércoles que las autoridades buscan «alertar de una situación que se percibe como inusual».
«Este año lo que estamos notando es un predominio de la circulación del virus chikunguña y una dispersión a una mayor proporción del territorio del país, cosa que no se había visto en temporadas anteriores», agregó la funcionaria.
En ese sentido, explicó que los arbovirus circulan tradicionalmente en el territorio paraguayo entre octubre y marzo o abril del año siguiente, con una mayor presencia de dengue.
Según los registros del despacho de Salud, en las tres últimas semanas de diciembre pasado se contabilizaron en promedio 750 notificaciones de posibles casos de chikunguña, de las cuales 576 fueron confirmadas.
La notificaciones por dengue sumaron 1.495 en total en ese mismo periodo, con diez casos confirmados y ocho probables.
En todo 2022 no se registraron pacientes con zika, enfermedad de la que se descartaron 4.523 notificaciones.
La mayor incidencia de chikunguña se concentra en Asunción, la capital del país, y en el departamento de Central (uno de los más poblados). También se han reportado casos en las zonas fronterizas, en especial con Brasil.
De Egea señaló que los registros preliminares de la primera semana epidemiológica (del 1 al 7 de enero) dan cuenta de unas 2.200 notificaciones de casos sospechosos de arbovirus, cuyos resultados están a la espera de ser confirmados.
Paraguay registró en 2015 el primer caso autóctono de chikunguña, que al igual que el dengue y el zika es transmitido por el mosquito Aedes aegypti. JS