Ginebra.- La alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, pidió hoy al Gobierno de Guatemala que garantice la libertad de expresión, opinión y asamblea en las protestas convocadas en el país en apoyo a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (Cicig).
«La libertad de expresión, sin miedo a represalias e intimidación, es la columna vertebral de la democracia», destacó la chilena en un comunicado donde señaló que «una cultura de derechos humanos y de paz se fortalece cuando diversos grupos sociales pueden expresarse en el espacio público».
Bachelet expresó asimismo su preocupación por la creciente erosión de varias instituciones del Estado guatemalteco, entre ellas los recientes ataques a la independencia de la Corte de Constitucionalidad (CC).
«Es esencial garantizar el Estado de derecho, la independencia e imparcialidad judicial y el respeto a las instituciones democráticas, en particular el CC, el estamento judicial, la Institución del Procurador de los Derechos Humanos, el Ministerio Público y el Tribunal Supremo Electoral», subrayó.
«El adecuado ejercicio de sus funciones es fundamental en el contexto actual y en las elecciones generales que tendrán lugar en los próximos meses. Su seguridad y el respeto a su integridad física, así como la de sus familias, deben ser garantizados por el Estado de Guatemala», añadió.
Las peticiones de la alta comisionada se producen cuando varias organizaciones de la sociedad civil de Guatemala han convocado para hoy y mañana martes diversos actos de protesta en rechazo al Gobierno de Jimmy Morales y en respaldo a la Cigig, establecida en 2007 por la ONU y el Estado guatemalteco.
Los manifestantes protestan la decisión de Morales de ordenar de forma unilateral y anticipada el fin de actividades de la Cicig y a la vez dan su apoyo a la CC, que dejó sin efecto provisionalmente la decisión del jefe de Estado.
Al menos cinco carreteras se encuentran bloqueadas hoy en el interior del país durante las primeras horas de actos de protesta.
La jornada de manifestaciones coincide con el tercer informe de Gobierno que deberá presentar el presidente Morales ante el Congreso, por lo que se ha dispuesto un amplio operativo con cientos de agentes en los alrededores de la sede parlamentaria.
