Tegucigalpa – El Sistema de las Naciones Unidas en Honduras expresó su consternación y preocupación por los lamentables hechos de violencia ejercida y los asesinatos contra personas de la comunidad Lésbico Gay, Bisexual, Transexual e Intersexual (LGBTI).
Las Naciones Unidas lamentan el asesinato de la voluntaria del Colectivo Unidad Color Rosa, Pamela Bonilla, del presidente de la Comunidad Gay Sampedrana para la Salud Integral, René Izaguirre y de la reconocida activista de la Comunidad Gay Sampedrana, Alejandra Padilla.
Dicen que esos asesinatos constituyen una afrenta a los valores de respeto de los derechos humanos reflejados en un Estado de Derecho y amenazan los esfuerzos para poner fin a la discriminación, la violencia y los asesinatos en contra de la población LGBTI y de aquellos que promueven y defienden sus derechos.
Por la situación el Sistema de las Naciones Unidas en Honduras pide a las autoridades de hondureñas hacer todo lo que esté a su alcance para investigar y encausar judicialmente a las personas responsables de estos asesinatos y poder implementar mecanismos de protección de las personas LGBTI.
Naciones Unidas reitera su apoyo e insta a las y los líderes políticos, religiosos y comunitarios, las organizaciones de trabajadores, el sector privado, los operadores de justicia, los profesionales de la salud, las organizaciones de la sociedad civil y los medios de comunicación para promover una cultura de paz y la universalidad de los derechos humanos y eliminar aquellas prácticas socio culturales que promueven la discriminación, el odio y la violencia en contra de cualquier colectivo humano, incluyendo a las personas LGBTI.
