Según Custodio, Honduras se convirtió en un foco importante para el trasiego de drogas por la corrupción en el sistema de justicia, la política de tolerancia y su ubicación geográfica.
Por enésima vez el defensor de los derechos humanos considera que estas tres condiciones, han convertido a Honduras en un “nido del narcotráfico”.
Declaró que la ubicación geográfica es un foco importante porque Honduras está dentro de las rutas más cortas hacia el mejor mercado del mundo que es Estados Unidos.
Mencionó como ejemplo que, en Centroamérica, Honduras es el país mejor ubicado para el aterrizaje de avionetas y también, por contar con miles de kilómetros de espacio marítimo que no se sabe proteger a lo que se suma un espacio aéreo que hasta ahora ha estado libre para los narcotraficantes.
Al extremo, dijo Custodio, que luego que República Dominicana bloqueó su espacio aéreo, casi todas las narco-avionetas utilizan el espacio aéreo hondureño, como lo señalan informes de entes especializados en el tema.
“Filtros” muy finos
Con relación al involucramiento de algunos policías y fiscales con el crimen organizado, Custodio reiteró que se deben usar “filtros muy finos” en los métodos de selección de personal de las instancias que integran el sistema de justicia en Honduras para evitar que sean permeadas por el narcotráfico.
Declaró que la depuración es necesaria y el pueblo hondureño debe apoyarla para que dé los resultados esperados.
Expresó que es indispensable realizar la evaluación socioeconómica del patrimonio de cada policía.
“Si un policía era pobre antes y ahora es millonario y no lo puede justificar de acuerdo a su sueldo y a sus otros ingresos, necesariamente eso da motivo a ser investigado”, puntualizó.
Considera que las pruebas de confianza deben aplicarse en forma indiscriminada y que en ningún momento debe estar dirigida a causarle daño a nadie.
Recordó que en la Ley Orgánica está enunciado que el policía tiene que someterse a los procedimientos propios de un “cuerpo sano”.
Sostuvo que la narcoactividad está en todo, motivo por el cual se debe tener mucho cuidado en quienes ingresan a la Academia de Policía, al Instituto Técnico Policial ó a la misma Academia Policial, quiénes ingresan como jueces y quiénes quieren ser parte del Ministerio Público.
“Tenemos que seleccionar con “pinzas” o tener métodos de selección de miembros de estas instituciones verdaderamente con filtros muy finos”, declaró.
Custodio comentó que la lucha contra la narcoactividad en el país no es fácil ya que hay mucho dinero de por medio y las personas que resisten la tentación de recibir dinero fácil del narcotráfico, son pocas.
Reconoció que la lucha contra la narcoactividad en el país, en las actuales circunstancias, es más difícil que antes.
“Antes se contaban y se conocían a los que se dedicaban al narcotráfico, hoy no se sabe quién está y quien no está en esta ilícita actividad”, señaló.
Consultado sobre el proceso de depuración declaró que él no puede calificar si va lento a va rápido pero que la misma se debe dar en la medida de lo posible.
Añadió que una buena depuración no consiste en sentarse a escribir en una lista y decir estos se van y estos se quedan, sencillamente la persona tiene que ser evaluada en forma individual y de acuerdo a las normas del derecho.
“Somos un Estado de derecho, el principio de inocencia debe respetarse pero también el principio de responsabilidad debe aplicarse”, opinó.
Finalmente comentó que La Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial es una institución del Estado que no se ha dejado empujar con prisas innecesarias sino que han ido a un ritmo y con desempeño ético.
