Buenos Aires.- Después de que la presidenta argentina, Cristina Fernández, confirmara en reiteradas ocasiones su intención de no presentarse a la reelección, dirigentes del oficialismo y de la oposición comenzaron esta semana a destapar sus aspiraciones presidenciales para los comicios del 2015.
Si bien ya eran conocidos los nombres de algunos de los postulantes a ocupar la jefatura del Estado argentino, en los últimos días hicieron públicas sus intenciones nuevos candidatos afines al kirchnerismo, mientras que la oposición estudia hoy posibles alianzas y acuerdos entre sus distintos bloques.
La sorpresa la dio el senador oficialista Aníbal Fernández quien, aunque había asegurado con anterioridad que «no lo descartaba», el viernes confirmó su intención de «competir» por la presidencia argentina.
«Entiendo que sí. Nosotros hemos creado una herramienta que permite que todo el mundo compita en el mismo partido. Ya no hay dinero que no se sabe de dónde proviene. Entonces, de ahí tiene que salir el candidato», dijo Fernández en declaraciones a una radio local.
Desde el oficialismo también dejó claras sus aspiraciones el gobernador de la norteña provincia de Entre Ríos, Sergio Urribarri, un todavía desconocido para la opinión pública, quien anunció que competirá en las próximas elecciones Primarias, Abiertas y Simultáneas como paso previo a su candidatura presidencial.
Tanto Fernández como Urribarri se suman a la larga lista de candidatos presidenciales que existe en el seno del oficialismo, con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, el primero en anunciar sus intenciones tras alejarse del «núcleo duro» del kirchnerismo.
«Aquellos que analizan las perspectivas a futuro, saben que yo transmito confianza. Por eso puede ser que me vean como un posible candidato presidencial», dijo Scioli el pasado jueves desde Nueva York donde se reunió con empresarios e inversores en el Consejo de las Américas.
A la lista de gobernadores con aspiraciones presidenciales saltó también esta semana el de la provincia de Salta, Juan Manuel Urtubey, quien no descarta llegar a algún tipo de acuerdo con Scioli en su carrera hacia la Casa Rosada.
También reconocidos kirchneristas, como el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, se han lanzado públicamente al campo de juego electoral, mientras que entre los que cuentan con el favor de la presidenta aparece su mano derecha y actual jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.
Desde la oposición, sigue sonando con fuerza uno de los antecesores de Capitanich en el equipo de Cristina Fernández, el peronista disidente Sergio Massa, que logró imponerse en las últimas elecciones legislativas del pasado año frente al oficialismo en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país.
Tras él, esta semana volvieron a saltar a los medios las aspiraciones del alcalde de Buenos Aires, el conservador Mauricio Macri, y del exgobernador de Santa Fe, el socialista Hermes Binner, quien ya se propuso para ocupar el despacho presidencial en 2011.
Las alianzas de cara a 2015 se estudian y analizan estos días entre estos y otros candidatos de la oposición, como Ernesto Sanz, titular de la Unión Cívica Radical (UCR), y el diputado y expresidente del Gobierno Julio Cobos.
A pesar de que en un principio se apuntaba a un acuerdo entre la Propuesta Republicana (Pro) de Macri con los radicales, hoy el alcalde de Buenos Aires desechó cualquier posibilidad.
«No vamos a participar en internas de ninguno de los partidos tradicionales, nosotros apostamos a una construcción nacional», afirmó el jefe de Gobierno porteño.
A falta de más de un año y medio para los comicios presidenciales y, según las últimas encuestas, la carrera por la sucesión la encabeza Sergio Massa, con un 21,1 %, seguido por Scioli, con un 16,2 %, y Macri ocuparía el tercer lugar con el 10 %.
La sorpresa la dio el senador oficialista Aníbal Fernández quien, aunque había asegurado con anterioridad que «no lo descartaba», el viernes confirmó su intención de «competir» por la presidencia argentina.
«Entiendo que sí. Nosotros hemos creado una herramienta que permite que todo el mundo compita en el mismo partido. Ya no hay dinero que no se sabe de dónde proviene. Entonces, de ahí tiene que salir el candidato», dijo Fernández en declaraciones a una radio local.
Desde el oficialismo también dejó claras sus aspiraciones el gobernador de la norteña provincia de Entre Ríos, Sergio Urribarri, un todavía desconocido para la opinión pública, quien anunció que competirá en las próximas elecciones Primarias, Abiertas y Simultáneas como paso previo a su candidatura presidencial.
Tanto Fernández como Urribarri se suman a la larga lista de candidatos presidenciales que existe en el seno del oficialismo, con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, el primero en anunciar sus intenciones tras alejarse del «núcleo duro» del kirchnerismo.
«Aquellos que analizan las perspectivas a futuro, saben que yo transmito confianza. Por eso puede ser que me vean como un posible candidato presidencial», dijo Scioli el pasado jueves desde Nueva York donde se reunió con empresarios e inversores en el Consejo de las Américas.
A la lista de gobernadores con aspiraciones presidenciales saltó también esta semana el de la provincia de Salta, Juan Manuel Urtubey, quien no descarta llegar a algún tipo de acuerdo con Scioli en su carrera hacia la Casa Rosada.
También reconocidos kirchneristas, como el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, se han lanzado públicamente al campo de juego electoral, mientras que entre los que cuentan con el favor de la presidenta aparece su mano derecha y actual jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.
Desde la oposición, sigue sonando con fuerza uno de los antecesores de Capitanich en el equipo de Cristina Fernández, el peronista disidente Sergio Massa, que logró imponerse en las últimas elecciones legislativas del pasado año frente al oficialismo en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país.
Tras él, esta semana volvieron a saltar a los medios las aspiraciones del alcalde de Buenos Aires, el conservador Mauricio Macri, y del exgobernador de Santa Fe, el socialista Hermes Binner, quien ya se propuso para ocupar el despacho presidencial en 2011.
Las alianzas de cara a 2015 se estudian y analizan estos días entre estos y otros candidatos de la oposición, como Ernesto Sanz, titular de la Unión Cívica Radical (UCR), y el diputado y expresidente del Gobierno Julio Cobos.
A pesar de que en un principio se apuntaba a un acuerdo entre la Propuesta Republicana (Pro) de Macri con los radicales, hoy el alcalde de Buenos Aires desechó cualquier posibilidad.
«No vamos a participar en internas de ninguno de los partidos tradicionales, nosotros apostamos a una construcción nacional», afirmó el jefe de Gobierno porteño.
A falta de más de un año y medio para los comicios presidenciales y, según las últimas encuestas, la carrera por la sucesión la encabeza Sergio Massa, con un 21,1 %, seguido por Scioli, con un 16,2 %, y Macri ocuparía el tercer lugar con el 10 %.
