Tegucigalpa – Desde esta mañana es notorio el desfile de oficiales señalados en el informe del diario The New York Times (NYT) de participar en el asesinato de Alfredo Landaverde y Julián Arístides González, quienes buscan “limpiarse” acudiendo al Ministerio Público.
Al menos cuatro oficiales de la Policía Nacional, se presentaron este martes a rendir declaración ante la Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida, en los casos relacionados con los asesinatos del zar antidroga Julián Arístides González y el analista Alfredo Landaverde.
Según el informe, los oficiales se presentan de manera voluntaria y serán atendidos por un fiscal de delitos contra la vida y la unidad de alto impacto.
Las fuentes de la Fiscalía indicaron que hasta el momento se desconoce en qué carácter llegan los cuatro miembros de la institución policial ya que aún no se define si lo harán para declarar o interponer alguna denuncia.
Hasta el momento los oficiales que se presentan ante la Fiscalía, son el comisionado Constantino Zavala, el subcomisario Héctor Caballero Velásquez, quien solicitó el lunes protección ante el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos y el subcomisionado José Ventura Flores Maradiaga y un cuarto miembro de la institución policial cuyo nombre no fue precisado, pero que se presume es un exdirector nacional de la Policía.
Otro que se presentó fue el subcomisario Yovany Fonseca, quien demandó que se esclarezca su situación. Asegura que él no participó en el asesinato se Julián Arístides González tal y como lo establece el periódico The New York Time, al tiempo que señaló que el día que se cometió el asesinato él custodiaba al expresidente Manuel Zelaya Rosales en la Embajada de Brasil.
Asimismo, se informó que en las próximas horas un grupo de miembros de la Policía Nacional asignados al cuartel de Casamata, han solicitado una audiencia con el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Roberto Herrera Cáceres al igual que lo hizo el lunes el subcomisario Héctor Caballero quien solicitó protección a ese organismo.
Esos miembros de la Policía son señalados en el informe de la Inspectoría General de la institución por su participación en la muerte del zar antidroga Julián Arístides González y de Alfredo Landaverde.
El comisionado Constantino Zavala Matute, indicó que presentará ante el Ministerio Público un escrito donde solicita al director de Fiscales, se le informe si él está siendo investigado en el caso del asesinato de Alfredo Landaverde.
Al mismo tiempo entregará a la Fiscalía un teléfono BlackBerry que era uno de los aparatos que manejaba en el momento que comandaba el Escuadrón Motorizado cuando fue asesinado Landaverde.
“También tenía otro número que es el 9966 5873 que estoy tratando de buscar el dispositivo porque se lo regalé a una persona y esa persona lo mandó a un taller, esperamos que no lo hayan trastocado y como decía el componente biográfico que aparece en el New York Time, que a mí me habían hecho un vaciado telefónico; si me hicieron un vaciado telefónico la Inspectoría, por qué no aparece en el informe investigativo el vaciado telefónico”, arguyó.
Recordó que dos años después de la muerte de Landaverde se presentó a declarar a la Fiscalía junto a la persona que andaba como copiloto en ese entonces.
Reiteró que se pone a disposición del Ministerio Público para cualquier instancia ya que él no tiene nada que ver con el asesinato de Landaverde pues su único pecado fue andar cerca de la escena del crimen, llegar rápido al lugar y andar custodiando a la esposa de la víctima, Hilda Caldera.
Cuestionó que ahora no sólo hay que defenderse ante los tribunales sino ante los medios de comunicación que lo han denigrado siendo una persona que procede de una familia honrada y por eso está actuando de frente presentándose voluntariamente ante el Ministerio Público.