Tegucigalpa– El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) recordó hoy, al Estado hondureño, que tiene la ineludible obligación internacional de realizar una investigación exhaustiva e imparcial para que se sancione a los responsables de la muerte del ambientalista Juan López, asesinado hace más de un año y cuyo crimen se mantiene impune.
La investigación, según el Conadeh, debe ser conducida por profesionales expertos, garantizando la independencia de las autoridades investigadoras, acusadoras y judiciales. Además, que se garantice la participación de sus familiares, todo ello con el propósito de sancionar a los responsables materiales e intelectuales del crimen.
El director del Observatorio Nacional de Derechos Humanos del Conadeh, Daniel Cáceres declaró que el Ministerio Público ha encausado a tres personas por el delito de asesinato, supuestos autores materiales. Sin embargo, considera que la investigación también debe ir orientada a castigar a los autores intelectuales.
Advirtió que, en caso que no se investigue o sancione a los responsables del crimen, a nivel nacional, es muy probable que el mismo sea del conocimiento, a nivel internacional, por la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) y eventualmente por la Corte Interamericana de los Derechos Humanos (CORTE IDH).
Indicó que el caso de Juan López tiene algunas características de otros casos como el de Janeth Kawas y el de Carlos Escaleras, ambos conocidos por el Sistema Interamericano y por los que el Estado de Honduras fue condenado.
Lo que se ve es una repetición crónica de los hechos contra los defensores del ambiente en el país, señaló.
De las casi 20 sentencias emitidas por la CORTE IDH contra el Estado de Honduras, desde 1989, tres de ellas están relacionadas con el asesinato de ambientalistas.
El primer caso fue el Blanca Jeannette Kawas, asesinada el 6 de febrero de 1995. El segundo caso fue el de Carlos Escaleras, un reconocido defensor del ambiente y de los derechos humanos, asesinado el 18 de octubre de 1997 en Tocoa, Colón. El tercer caso es el de Carlos Antonio Luna López, representante del Movimiento Ambientalista de Olancho, asesinado el 18 de mayo de 1998.
Se estima que, en Honduras, más 60 defensores de los derechos humanos perdieron la vida, en circunstancias violentas, entre el año 2020 y el 2025, cuyos crímenes, en la mayoría de los casos, se mantienen en la impunidad. Entre las víctimas figuran defensores de la tierra, del territorio, del medio ambiente y de los pueblos originarios.
El pasado 2 de septiembre, la Fiscalía Especial de Delitos Contra la Vida (FEDCV) logró que un juez con jurisdicción nacional dictara auto de apertura a juicio oral y público contra tres hombres acusados por el asesinato del ambientalista, Juan Antonio López, hecho ocurrido el 14 de septiembre de 2024.
Quién era Juan López
Juan López fue un valiente defensor de los derechos humanos y del ambiente, esposo, padre de familia, líder comunitario y referente religioso en el municipio de Tocoa, Colón.
Desde su fe y compromiso social coordinó el Comité Municipal de Defensa de los Bienes Comunes y Públicos de Tocoa.
Ejerció como delegado de la Pastoral Social de la Diócesis de Trujillo y fundó la Pastoral de Ecología Integral en Honduras.
Su liderazgo también se proyectó en lo público como regidor municipal, siempre guiado por la convicción de proteger los bienes comunes, como el rio Guapinol y el Parque Nacional Carlos Escaleras. IR