Tegucigalpa. La menor Briana Reyes, de dos años de edad, se convirtió esta noche en la primera víctima de la explosión suscitada hoy viernes en la Feria del Agricultor, popularmente conocido como el mercado del mayoreo, informaron las autoridades del Hospital Escuela Universitario, al aseverar que las expectativas de vida de la pequeña eran pocas.
La doctora Roxana Araujo, jefe de Emergencias del Hospital Escuela Universitario, confirmó a Proceso Digital que la menor falleció producto de las lesiones sufridas en el percance, al recordar que a tempranas horas del día tuvo un paro respiratorio del cual los médicos la pudieron revivir al darles los auxilios correspondientes, pero “su estado era muy delicado, las expectativas de vida eran muy pocas”.
La imagen de su padre corriendo sofocado con su hija en brazos en búsqueda de ayuda en la estación principal del Cuerpo de Bomberos, en las cercanías del percance, fue una de las primeras que recorrió los espacios mediáticos del país, pero pese a los esfuerzos de los cuerpos especializados de la medicina, la pequeña finalmente falleció la noche de este viernes.
Briana Reyes se convierte así en la primera víctima fatal que dejara el estallido de tres chimbos de gas en el populoso mercado del mayoreo, que registra también en sus más de tres décadas de creación, el primer incidente de esa naturaleza.
La doctora Araujo dijo que la menor llegó con más del 50 por ciento de su cuerpo con quemaduras.
Al menos unas 70 personas resultaron heridas con quemaduras desde leves a graves, muchos de los cuales fueron operados de emergencia en el Hospital Escuela Universitario, mientras otros fueron trasladados al Seguro Social y al Hospital San Felipe.
Las autoridades hospitalarias, junto a las de la Secretaria de Salud, coordinaron esfuerzos para poder responder con diligencia ante la emergencia, en un viernes capitalino caracterizado por muertes violentas, siniestros, hasta intoxicados por fuga de químicos.
La Feria del Agricultor o mercado del mayoreo es el principal centro de venta de productos alimenticios que de viernes a sábado congrega a gran parte de los capitalinos para realizar compras a bajo costo, convivir un rato con las diversiones que ahí se ofrecen, degustar la gastronomía y reeditar pasajes de la Tegucigalpa antigua alrededor del comercio.
