Esa medida la adoptaron tres de los cuatro países miembros del acuerdo migratorio conocido como CA-4 en respuesta a la destitución del mandatario hondureño Manuel Zelaya, por considerar Honduras un país vulnerable, ya que no cuenta con infraestructura marítima.
El presidente del Cosep recordó que Honduras es el tercer destino de exportación de Nicaragua, después de Estados Unidos y El Salvador.
Asimismo, Aguerrí aseguró que, si bien es cierto el cierre de frontera norte estará vigente por dos días, las empresas nicaragüenses tienen compromisos de pedidos de productos y deben de cumplir con los compradores.
«Por qué vamos a castigar al consumidor nicaragüense confundiendo el tema político con los económicos. Nicaragua es un país sumamente vulnerable», enfatizó el empresario.
El Cosep teme que el cierre de las relaciones comerciales fronterizas con Honduras profundicen más la crisis que atraviesa el sector exportador nicaragüense a consecuencia de la contracción del mercado internacional producto de la crisis económica global.
Estas declaraciones se suman al pronunciamiento de rechazo emitido por la Federación de Cámaras Agropecuarias y Agroindustriales (Fecagro) a la medida aprobada por los presidentes de Nicaragua (Daniel Ortega), El Salvador (Mauricio Funes) y Guatemala (Álvaro Colom), por considerar la medida perjudicial para la economía de la región centroamericana.