El evento político se celebró en Tegucigalpa entre el edificio principal de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) y las instalaciones del Centro Cristiano Internacional (CCI), en la colonia El Trapiche, donde Castro fue acompaña por los candidatos a diputados por el departamento de Francisco Morazán y su candidato a alcalde por el Distrito Central, Rafael Barahona.
Nuevamente, Castro inició su intervención elogiando el proceso electoral que se celebra en Chile y destacó que “una mujer del partido socialista repunta en los resultados”.
En ese sentido, le deseo suerte a la ex presidenta (2006-2010) y actual candidata socialista Michelle Bachelet quien se perfila como la nueva mandataria chilena.
“En el hermano país de Chile, se está llevando a cabo el proceso electoral para escoger al próximo presidente de la nación y una mujer del partido socialista está encabezando el primer lugar y desde aquí, del cierre de campaña de Tegucigalpa y de Francisco Morazán, yo quiero desearle a nuestra amiga, Michelle Bachelet, mucha suerte en este proceso”, reiteró.
Destacó que sólo restan siete días para que se celebren las elecciones generales que ella ganará y a partir de ese momento, estará “impulsando un proyecto, una lucha y un nuevo porvenir para Honduras”, por lo que pidió a sus seguidores y al pueblo hondureño que “confíen en mí”.
Castro reiteró nuevamente su promesa de representación a la población hondureña y su proceso de refundación por medio de una Asamblea Nacional Constituyente.
Afirmó conocer las necesidades de la población hondureña como la existencia de “escuadrones paramilitares que asesinan a los jóvenes”, así como las dificultades de alcanzar una fuente de empleo y los servicios de salud y educación.
En ese sentido, destacó que “apenas faltan siete días para que Honduras cambie e inicie un proceso de refundación”.
La también ex primera dama, cerró su participación destacando que “por primera vez, una mujer será la presidenta de Honduras”.
Añadió que “nadie detiene a Libre porque este es un proyecto de Dios y del pueblo hondureño”.