La Haya – El Museo Van Gogh de Ámsterdam advirtió hoy de que podría verse obligado a cerrar temporalmente si el Gobierno neerlandés no aumenta la financiación destinada a una renovación esencial prevista para 2028, cuyo coste total asciende a 104 millones de euros, y alertó de que esto sería un incumplimiento de Países Bajos a un “acuerdo histórico”.
El museo reclama que el subsidio estatal anual pase de 8.5 a 11 millones de euros para cubrir un déficit estructural de 2.5 millones, pero el Ministerio de Educación, Cultura y Ciencia rechaza la petición y sostiene, basándose en estudios propios, que el nivel de apoyo actual es suficiente, según un comunicado de la pinacoteca, publicado después de una entrevista de la directora de la institución, Emilie Gordenker, con el New York Times, para denunciar la situación.
Gordenker alertó de que, sin estas obras, no se puede garantizar la seguridad de las colecciones, los visitantes y el personal. “Eso es lo último que queremos, pero si llegamos a esa situación, entonces tendremos que cerrar el edificio”, señaló.
El conflicto se remonta al histórico acuerdo firmado en 1962 entre el Estado neerlandés y V.W. van Gogh, sobrino del pintor, conocido como el “Ingeniero”.
A cambio de transferir toda la colección -más de 200 pinturas, 500 dibujos y 900 cartas, además de obras de sus contemporáneos- a la Fundación Vincent van Gogh (creada para este fin), el Estado se comprometió a construir y mantener un museo que garantizara su conservación y exhibición permanente.
Inaugurado en 1973, el museo se convirtió en un éxito inmediato y desde entonces ha recibido casi 57 millones de visitantes, con un récord de 2,6 millones en 2017, según datos oficiales. Es uno de los destinos culturales más importantes de Ámsterdam, genera el 85 % de sus ingresos propios y, según el consistorio de la capital, es de “gran valor” tanto para la ciudad como para el país.
Sin embargo, después de medio siglo de “uso intensivo”, el edificio, propiedad del Estado, presenta deficiencias en sostenibilidad, seguridad y control climático. La mayoría de sus instalaciones técnicas están obsoletas y los requisitos legales de eficiencia energética obligan a acometer reformas profundas, recordó el museo.
El “Masterplan 2028” prevé tres años de trabajos, con el museo parcialmente abierto al público, y el proyecto contempla 76 millones de euros en mantenimiento y renovaciones, 23 millones en sostenibilidad y 5 millones en mejoras. El museo ya ha comprometido recursos propios, como la cobertura de la pérdida de ingresos estimada en 50 millones de euros durante las obras.
La Fundación Vincent van Gogh, propietaria de casi toda la colección, respalda al museo y recordó que el Estado tiene la obligación legal de cumplir con el acuerdo de 1962. “Una promesa hecha es una promesa cumplida, incluso cuando se trata de un gobierno”, señaló en un comunicado.
El Ministerio indicó que la subvención asignada para la infraestructura es suficiente para poder llevar a cabo el mantenimiento necesario y aseguró que basa su posición en una amplia investigación realizada por expertos a instancias del gobierno.
El Van Gogh presentó objeciones en 2023 contra esa decisión de subsidio e inició ahora un procedimiento judicial contra el Estado. La vista se celebrará el 19 de febrero de 2026. EFE