· Zelaya envía carta a Obama pidiendo suspensión de visas y cuentas bancarias a militares y funcionarios
· A su vez, Chávez insiste en “veraneo” e insinúa a Zelaya no dejarse “humillar”
En su desplazamiento al puesto fronterizo de Las Manos, en el departamento de El Paraíso, Zelaya dijo que “vamos a poner un campamento con agua y comida, vamos a permanecer hoy en la tarde, en la noche, mañana en la mañana, esperando a la gente que viene, esperando a mi familia”.
Acto seguido, comenzó a arengar en el altoparlante para incitar a sus seguidores y a la prensa que le acompañaba, a promover la insurrección, sacar a Micheletti del poder y a todos sus funcionarios, a quienes aseveró, los va “a amarrar” para sacarlos del país.
Luego, en una carta enviada al presidente estadounidense, Barack Obama, difundida por la red televisiva de CNN, Zelaya pide que endurezca las medidas contra Honduras y que proceda a cancelar la visa y las cuentas bancarias en el exterior a varios militares, entre ellos el general Romeo Vásquez Velásquez, actual jefe del estado mayor conjunto de las Fuerzas Armadas; el Fiscal de la República, Luís Rubí, y la Procuradora General de la República, Rosa América Miranda.
La sombra del Canciller de Venezuela
Su ex ministro de la presidencia, Enrique Flores, en declaraciones a medios locales televisivos, señaló que el campamento instalado por Zelaya es parte de las acciones para coordinar la resistencia de retorno, al tiempo que prometió “imponer disciplina” entre los simpatizantes de Zelaya para que no agredan a los medios de comunicación nacionales. Zelaya y el equipo con quien efectúa “camping” en la frontera, solo permiten acceder a sus medios afines y a la prensa internacional.
![]() | Mientras el depuesto gobernante, espera en la frontera la llegada de su familia, seguido de quien ha sido su principal guardaespaldas en las últimas 72 horas, el canciller venezolano, Nicolás Maduro, sus seguidores, escasos, según los analistas internacionales consultados por CNN, intentaban acercarse al ex gobernante, mientras llamaban a medios afines para que la gente bordeara los cerros y burlara el toque de queda instalado por el gobierno en esa zona. |
Zelaya, quien rehuyó el viernes anterior pisar territorio hondureño por temor a ser capturado, al permanecer en la franja neutral que comparten en la frontera Honduras y Nicaragua, busca así mantener la atención de la comunidad mediática, evitar que caiga el desánimo entre sus seguidores y continuar desafiando a la comunidad internacional, al secretario general de la OEA, Miguel Insulza, y a Washington con quien no se atreve a definir claramente sus relaciones, ante la fuerte presión que el gobierno de Venezuela ejerce sobre él.
El viernes, al entrar a la zona neutral, por primera vez desde su salida, Zelaya dijo que “si regreso, con la oposición que me han montado, no podré gobernar, y Micheletti, con la resistencia que yo le tengo ahí adentro, tampoco; entonces, mejor dialoguemos para ver si buscamos una solución”. Eso lo dijo, estando él sólo.
Pero cuando regresó al carro todoterreno asignado por Ortega, en el interior le esperaba el canciller venezolano, Maduro, quien se ve desde la televisión que le llama la atención, le entrega un teléfono para que responda una llamada, y Zelaya cambió de tono y volvió a su forma original: arengar contra sus detractores, incitar a la revolución y volver a posar para las cámaras de televisión y fotográfica, apartando incluso a varios de sus seguidores para permitir que los flashes le enfocaran “su mejor ángulo”.
¡No se humille!: Chávez al depuesto Zelaya
Desde el segundo atrevimiento de Zelaya por querer ingresar al país, el silencio del presidente venezolano había sido notorio, hasta que lo rompió este fin de semana para desacreditar al gobernante de Costa Rica y mediador en las negociaciones entre las delegaciones de Zelaya y Micheletti en busca de una solución a la crisis política del país.
![]() | El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, arremetió el sábado contra la mediación de Arias y vinculó el derrocamiento de su aliado Manuel Zelaya a un “plan de Estados Unidos para agredir a sus aliados en la región”. Chávez calificó las conversaciones lideradas en Costa Rica por el presidente Oscar Arias como una «trampa» instrumentada por Washington para «fusilar políticamente» a Zelaya y consideró «correcto» el intento del depuesto mandatario de regresar a la nación centroamericana. |
«Es lamentable el papel que el presidente Oscar Arias está jugando, sin duda lo que está es repitiendo lo ordenado por el Departamento de Estado y eso es indigno de un presidente de América Latina», dijo.
Según Chávez, Washington plantea con Honduras el inicio de una estrategia más amplia de agresiones en contra de sus aliados y acusó al presidente Barack Obama, de empezar a “botar” la máscara que ha tenido en torno al problema hondureño.
Incluso, trascendió en forma extraoficial que Chávez estaría presionando aún más a Zelaya para que endurezca más sus posiciones para demandar mayor respaldo internacional.
La osadía de Zelaya al intentar cruzar la frontera fue calificada por Washington como “imprudente”, mientras el resto de la comunidad internacional le llamaba a evitar un baño de sangre, pero el malestar de Chávez ante esos llamados de prudencia internacionales, no se hizo esperar.
En sus declaraciones esta sábado en Caracas, Chávez dijo: «‘Imprudente’, dice entonces la doctora Clinton… ¿Qué es imprudente?, que no debe volver así de esa manera. ¿Cómo? ¿Arrastrado? ¿Indigno? Lo que ellos quisieran (es) que Zelaya terminara arrastrándose», acotó.
No obstante, el premio nobel de la paz, Óscar Arias, es del criterio que la fugaz entrada en Honduras del depuesto Zelaya “no es el camino” para solucionar la crisis en este país, y abogó porque se suscriba la última propuesta de mediación presentada esta semana.