El Gobierno chapín hizo «un llamado a quienes detentan el poder para que se garantice la integridad física de Zelaya, y de los miembros de su Gobierno» y a «que se respeten los derechos humanos de todos los hondureños», según un comunicado difundido por la cancillería pero el depuesto gobernante arengó esta tarde a sus seguidores recordándoles que su consigna invariable es “patria, restitución o muerte”.
Guatemala también hizo un llamamiento «a la sociedad hondureña para que evite enfrentamientos que dividan aún más a los ciudadanos y que puedan causar daño a su integridad física y a la propiedad privada».
El Gobierno guatemalteco además pide a las partes involucradas «la firma y ejecución del Acuerdo de San José, como paso previo y necesario para la celebración de elecciones libres el próximo 29 de noviembre, para elegir un nuevo Presidente Constitucional».
Asimismo, reitera su apoyo al llamado de la comunidad internacional «para restablecer de inmediato el orden constitucional en Honduras.
Zelaya, fue sustituido en sus funciones el 28 de junio pasado y enviado a Costa Rica, este lunes regresó por sorpresa a Tegucigalpa, con el objetivo de ser reinstalado en el Gobierno.
