Tegucigalpa – La Dirección Policial de Investigación (DPI), confirmó este viernes que 139 marinos que llegaron el pasado miércoles a Honduras procedentes de Brasil, finalmente fueron aislados de manera domiciliaria.
En ese sentido, el vocero de la DPI, Cristian Nolasco, señaló inicialmente que no a todas las personas les gusta cumplir con los protocolos de seguridad para evitar que se propague el contagio del COVID-19 “pero bien nos gusta exigir que los demás si cumplan la cuarentena”, criticó.
Admitió que los marinos ya estuvieron tres semanas en cuarentena ya con el visto bueno ingresaron, pero hay que recordar que cada país tiene sus propios protocolos de bioseguridad para enfrentar el coronavirus.
En ese sentido, agregó que las autoridades del Sistema Nacional de Riesgos (Sinager) “han tomado a bien darles aislamiento domiciliario en un hotel de la capital industrial del país -San Pedro Sula- se les está dando seguimiento para que ninguno de ellos incumpla con los protocolos”.
Además confirmó que por el punto fronterizo de Corinto, entre Guatemala y Honduras, ha ingresado un grupo de 78 de emigrantes retornados, llegaron en un microbús, pero se les están aplicando todas las medidas, se les aplicaron las pruebas y todos dieron negativo de coronavirus, afirmó.
“Es por eso que Sinager, tomó la determinación de aislarlos domiciliariamente donde se les está dando el respectivo seguimiento”, sostuvo el funcionario policial.
La vicecanciller para asuntos consulares y migratorios de Honduras, Nelly Jerez, explicó el pasado jueves que todo hondureño deportado debe cumplir cuarentena como medida de prevención frente a emergencia por COVID-19.
Lo anterior, ante una serie de reclamos de parte de los familiares de los marinos, quienes sostienen que ellos ya hicieron cuarentena en Brasil, por sospechas de estar contagiados de COVID-19, sin embargo las autoridades hondureñas han determinado que ellos deben hacer una nueva cuarentena en Honduras.
Y es que según, la diplomática de la Cancillería de Honduras, 5 marinos de este grupo dieron positivo a la prueba de COVID-19 en Brasil y el grupo que fue trasladado a Honduras tuvo contactos con ellos.
