Tegucigalpa/Caracas (Especial Proceso Digital/Agencias) – Un aislado Nicolás Maduro, cuyo supuesto triunfo en las elecciones del domingo no son reconocidas en la mayor parte de los países del mundo, se aferra al poder, junto a la cúpula del chavismo venezolano, mientras crecen las denuncias de fraude y miles de personas se movilizan en Caracas contra el heredero de Hugo Chávez, líder y fundador del movimiento político chavista.
– El gobernante chavista enfrenta una deslegitimación a su mandato tanto a nivel interno como externo, ya que muchos señalan que hubo fraude en los resultados.
Por su lado en Honduras, diversas voces se elevaron contra lo ocurrido en Venezuela, pero acentuaron su preocupación por el veloz reconocimiento y los saludos del gobierno hondureño, así como se activaron las alarmas del proceso electoral del 2025 cuando el país renueve a sus autoridades de los poderes Ejecutivo y legislativo, así como los gobiernos municipales.
Analistas señalaron que la rápida felicitación de Tegucigalpa significa que la actual administración de Libre está de acuerdo con los métodos de Maduro para retener el poder y que la numerosa delegación enviada a Caracas fue a instruirse como manejar una elección sin importar la voluntad del pueblo.
Aislado y rechazo a su “triunfo”
La comunidad internacional, con excepción de ocho naciones –entre las que está Honduras-, inmediatamente rechazó los resultados dados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) que le dio a Maduro una victoria de 51.2 % sobre el 44.2 % otorgado a Edmundo González de la Plataforma de Unidad Democrática (PUD), el mayor grupo opositor, a pesar que las encuestas previas, los sondeos a boca de urna y los mismos conteos rápidos otorgaban al opositor una ventaja de 30 % sobre el gobernante.
Pero tras seis horas de espera, un apagón informático, que el gobierno culpa a la oposición, el CNE apareció dando a Maduro esa ventaja en las primeras horas del lunes con el 80 % de votos escrutados y horas después concedió el mismo margen sobre el total de votos, dando el triunfo definitivo al heredero de Chávez.
Pero los gobiernos latinoamericanos de Uruguay, Argentina, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú y República Dominicana exigieron una revisión completa de los resultados y pidieron una actuación de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Por su lado Maduro pidió a los gobiernos de Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay que retiraran su personal diplomático, lo que equivale a una ruptura de relaciones diplomáticas.
El presidente salvadoreño Nayib Bukele también rechazó los resultados de los comicios venezolanos.
Mientras Colombia y el gigante Brasil no se han pronunciado directamente sobre los resultados de los comicios y el reconocimiento a Maduro. Brasilia emitió un comunicado de su cancillería, pero sin definir una posición clara.
Y es que tanto los gobiernos, observadores y analistas reclaman que se revisen las actas de los centros de votación, algo a lo que el gobierno y el CNE se opone y únicamente dan los resultados generales sin entrar en detalles.
Solo el escrutinio de las actas de las urnas, señalan gobiernos y observadores, pueden dar salida a la crisis electoral y llevar estabilidad a Venezuela, ya que aseguraría la limpieza de los resultados.
Estados Unidos se encuentra en la misma línea de exigir una revisión, ya que considera que los resultados dados por el CNE no “reflejen la voluntad de los votos, ni del pueblo venezolano”, según una declaración de su secretario de Estado, Antony Blinken.
Solo Rusia, China, Serbia, Nicaragua, Cuba, Honduras, Bolivia y Guinea-Bisáu reconocieron el triunfo de Maduro, quien fue felicitado por los gobernantes de estas ocho naciones, incluyendo a la hondureña.
Miles protestan
A la presión internacional, se sumó la local con miles de caraqueños que salieron a las calles a protestar por los resultados que dan el triunfo a Maduro contra González. También se registraron protestas en las ciudades del interior, de acuerdo a reportes de los medios locales y posteos en redes sociales.
La policía y la Guardia Nacional Bolivariana reprimieron con gases lacrimógenos a los manifestantes en la capital del país.
La máxima figura de la oposición, María Corina Machado, ha señalado que González fue el ganador e indicó que la lucha no ha terminado.
Gobierno está de acuerdo con métodos de Maduro
La socióloga Julieta Castellanos dijo a Proceso Digital que la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, se convirtió en la primera mandataria en felicitar al gobierno de Nicolás Maduro por los resultados electorales recientes en Venezuela.
Castellanos afirmó: «Yo creo que aquí hay una dualidad en el gobierno de Libre. Rechazaron los resultados electorales de los años 2013 y 2017, este último con un saldo significativo de muertos y una alta conflictividad social. Comparadas con las elecciones en Venezuela, no hay mucha diferencia, y probablemente las elecciones venezolanas tengan más peso de deslegitimación. Sin embargo, el gobierno de la presidenta Castro fue el primero en felicitar los resultados electorales y al pueblo de Venezuela».
La socióloga cuestionó los parámetros con los que el gobierno de Honduras mide lo que llaman «dictadura» o «narcodictadura» en su propio país y cómo definen la democracia en Nicaragua. «La pregunta ahora para ellos es en qué se diferencia el régimen que ellos llaman dictadura y el régimen actual de Venezuela con la persecución política y los exiliados”.
“Lo que se está viendo muy obvio es que, si el gobierno de Honduras felicita los resultados electorales de Venezuela, es porque está de acuerdo con esos procedimientos y formas para retener y controlar el poder», añadió Castellanos.
En ese sentido, Castellanos destacó tres puntos clave que caracterizan estas elecciones como no democráticas.
Primero, mencionó la persecución constante a la oposición venezolana, citando el caso de María Corina Machado, quien fue inhabilitada por la justicia y no pudo competir. Esto dio lugar al surgimiento de Edmundo González Urrutia como candidato.
En segundo lugar, Castellanos criticó el manejo del voto en el exterior. A pesar de que millones de venezolanos han emigrado, se habla entre 5 a 7 millones, solo 60,000 pudieron registrarse para votar, una cifra que considera una vulneración del derecho a la participación ciudadana.
Asimismo, destacó la ausencia de observadores electorales internacionales, ya que el gobierno de Nicolás Maduro prohibió su llegada, lo cual, según Castellanos, genera desconfianza. También mencionó incidentes ocurridos el día de la votación, como la restricción de entrada a veedores opositores, la no entrega de copias de actas y el retraso en la transmisión de resultados.
Aprendieron el manejo electoral
De su lado el analista Raúl Pineda indicó que la delegación hondureña que fue a Venezuela, integrada por altos funcionarios gubernamentales, diputados y otras figuras de Libre, fue a aprender cómo manejar una elección, donde se vota con relativa libertad, pero sus resultados no reflejan la voluntad mayoritaria.
“Las elecciones fueron tranquilas, fueron ejemplares, pero los resultados no”, apuntó al observar que a Maduro lo está poniendo de presidente, el Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano.
Pineda Alvarado considera que un escenario similar podría pasar en Honduras en los próximos comicios generales. “Lamentablemente no hay vocación democrática en los que pierden las elecciones pero tienen el poder”, aseveró.
Para el analista, tras estos resultados, ahora Venezuela se encamina a un aislamiento internacional tremendo, además advirtió que la confrontación interna es inevitable.
“La confrontación interna se va a dar, la oposición no se va a quedar de brazos cruzados”, afirmó al agregar que lo verdaderamente serio es cómo los medios de comunicación del gobierno se involucraron en la campaña de Nicolás Maduro. (PD).
