Tibisay Lucena, presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), anunció la fecha de la consulta tras recibir el proyecto de enmienda constitucional que será votado de manos de Cilia Flores, su homóloga de la Asamblea Nacional (AN), de 167 miembros, casi todos afectos al Gobierno de Chávez.
«El 15 de febrero presentaremos una impecable jornada» de comicios, «el CNE garantiza la pulcritud de los resultados», declaró Lucena en un acto oficial celebrado en la sede del Poder Electoral.
Según Lucena, la directiva del organismo electoral celebrará esta misma tarde una sesión plena para aprobar formalmente la fecha del referendo y las normas de publicidad y propaganda que regirán la campaña, que comenzará mañana.
Lucena también planteó a la AN que apruebe una ley para referendos que permita ampliar la jornada de votación, de manera que durante la consulta del 15 de febrero los centros electorales cierren a las 18.00 hora local (22.30 GMT) y no a las 16.00 (20.30 GMT), como está establecido actualmente.
La ley venezolana establece que el Poder Electoral cuenta con 30 días continuos a partir de la recepción del proyecto de enmienda para convocar la obligada consulta popular.
En diciembre pasado, Chávez pidió a sus aliados en el Parlamento presentar de inmediato un proyecto de enmienda sobre la reelección ilimitada presidencial, con el argumento de que solo su permanencia en el poder garantiza el avance de la «revolución» que lidera desde hace una década.
«Debo quedarme al menos 10 años más al frente del Gobierno (…) para echar las bases sólidas de nuestra revolución bolivariana, de la transformación del capitalismo al socialismo», comentó recientemente el mandatario de Venezuela, país que es el quinto exportador mundial de crudo.
El pasado 5 de enero, Chávez dijo haberse equivocado al plantear la reelección ilimitada solo para el presidente y propuso extenderla a todos los cargos escogidos por el voto popular, al tiempo que pidió que el referendo se realizara a más tardar el 15 de febrero.
La oposición considera que el inesperado giro de Chávez responde al presunto «amplio rechazo» popular a la reelección ilimitada presidencial y, por tanto, el mandatario buscaría «adhesiones políticas» con su ampliación a todos los cargos electos.
Representantes opositores insisten en que la propuesta de la reelección ilimitada es «ilegal» porque el asunto ya estaba incluido en la amplia reforma constitucional presentada por Chávez en 2007 y rechazada en las urnas en diciembre de ese año.
Argumentan que la propuesta de Chávez no es una simple enmienda sino una reforma, ya que altera el principio de alternancia en el poder.
Además, la ley prohíbe replantear en el mismo período presidencial un cambio constitucional ya rechazado popularmente.
Al hacer entrega del proyecto al CNE, la presidenta de la AN volvió a defender el carácter democrático de la enmienda, con el argumento de que su aprobación «ampliaría los derechos» políticos del pueblo.
El proyecto de enmienda fue aprobado el miércoles en segunda y última discusión legislativa, y la AN propuso la siguiente pregunta para el referendo:
«¿Aprueba usted la enmienda de los artículos 160, 162, 174, 192 y 230 de la Constitución de la República, tramitada por la Asamblea Nacional, que amplía los derechos políticos del pueblo con el fin de permitir que cualquier ciudadano o ciudadana en ejercicio de un cargo de elección popular pueda ser sujeto de postulación como candidato o candidata para el mismo cargo por el tiempo establecido constitucionalmente dependiendo su posible elección exclusivamente del voto popular?».
Lucena declaró ayer a la prensa que seguramente no habrá «ningún tipo de reconsideración» en cuanto a la redacción de la pregunta, que ha sido calificada de «engañosa» por la oposición.