Por: Otto Martín Wolf
Todos los estudios médicos indican que una persona puede sobrevivir hasta seis semanas sin alimentos, siempre y cuando se mantenga hidratado.
Desde el día uno sin alimentos, el cuerpo empieza a utilizar reserva acumulada, especialmente en grasa y otros tejidos.
Pero, al igual que una cuenta de ahorros a la no se le deposita y sólo se le extrae, cuando se terminan las reservas, el cuerpo, al terminar los ahorros y tratando de sobrevivir, empieza a consumir lo guardado en músculos, vísceras y órganos, hasta que finalmente, agotado el combustible, deja de funcionar y se produce lo que literalmente se denomina morirse de hambre (en un caso así también los gusanos se mueren de hambre rápidamente).
Es imposible engordar si no se ingieren alimentos, eso quedó de sobra comprobado en los campos de concentración nazi, ahí nadie padecía de la tiroides (culpada por muchos golosos como la causa de su gordura).
Y ahora mucha atención señoras y señores, niños de todas las edades, representantes internacionales del Libro de Records Guinnes: Honduras se ha convertido en el único país en donde es posible ponerse en huelga de hambre y engordar!
Eso es lo que sucede con ese grupo ubicado frente a Casa Presidencial.
Tengo entendido que empezaron el 22 de Junio, hace más de un mes, sin que hasta este momento se produzca ni una baja (cosa que desde el fondo de mi corazón no deseo por ningún motivo).
Pero si deseo fervientemente que se sepa la realidad de lo que ahí sucede, en términos alimenticios que conste, la parte política se la dejo a los políticos.
Cómo pueden estar vivos esos que no han probado bocado en tanto tiempo? Deberían de mandar la receta a Rwanda y otros países africanos siempre en hambrunas.
Hace años un avión conduciendo un equipo de fútbol cayó sobre las eternas nieves de los Andes. Sin nada que comer, a punto de morir, decidieron alimentarse con los cadáveres de los perecieron en el accidente.
Ojalá que no esté sucediendo lo mismo dentro de esas tiendas de campaña.
Me extrañó mucho ver las fotografías de unos indios tolupanes con plumas de gallina en la cabeza. Huelga de hambre? Pero si ellos hambrean todo el tiempo! Creo que los organizadores se aprovecharon de su nobleza.
Gandhi, el gran Gandhi, creador de las huelgas de hambre como arma de la resistencia civil, jamás bloqueó una calle. Tampoco se tendió a ayunar en un lugar visible. Lo hizo siempre en su casa, hasta donde llegaba el pueblo a rogarle que comiera algo y la prensa internacional para llevar noticias al mundo sobre su estado de salud.
No necesitaba llamar la atención causando incomodidad a otros ni bloqueando la circulación. Gandhi era un hombrecito menudo que no buscó jamás notoriedad personal ni cargos o títulos. Le interesaba únicamente la independencia de India y, a fuerza de ayuno, la logró.
Ojalá que nuestros huelguistas sigan gozando de buena salud mientras continúan sin comer y, también, ojalá que su actitud no desprestigie el legado de Gandhi, lo que sucederá si se comprueba que por las noches les llevan donas o pizza.
Dicen que no se debe jugar con el hambre del pueblo y tienen razón, pero tampoco se debe jugar con las huelgas de hambre.
En cuanto a los tolupanes, no sé se les habrán ofrecido algo, espero que al menos les hayan dado las desplumadas gallinas como pago por su cómica fotografía.